Denuncian que la Embajada de Venezuela desconoce la situaciĆ³n de los afectados por el canje de las licencias

La comunidad venezolana en EspaƱa se siente a la deriva. Entre la dinĆ”mica de adaptarse a un nuevo paĆ­s y sobrevivir al proceso migratorio, le suman el hecho de que no existe una representaciĆ³n diplomĆ”tica capaz de velar por los problemas a los que se enfrentan cada dĆ­a y ayudarlos a buscar una soluciĆ³n verdadera.

Esto es lo que sucede con las personas afectadas por la cancelaciĆ³n del acuerdo del canje de las licencias de conducir, pues las recientes declaraciones emitidas por Antonio Ecarri, embajador del gobierno interino de Juan GuaidĆ³, denotan, segĆŗn algunas de las personas afectadas, un desconocimiento real de la situaciĆ³n y una inacciĆ³n absoluta que lejos de colaborar con la soluciĆ³n del problema, los deja en un limbo jurĆ­dico y en un completo estado de indefensiĆ³n.

Ecarri anunciĆ³ que solicitarĆ­a a las autoridades espaƱolas la reconsideraciĆ³n de la cancelaciĆ³n del acuerdo para el canje de permisos de conducir de venezolanos y que a cambio se les someta a una prueba prĆ”ctica, pero la realidad es que esto no resuelve el problema de fondo, que es el desastre que hay en el organismo venezolano responsable de la emisiĆ³n de los carnets de conducir, cuyo funcionamiento depende del rĆ©gimen de NicolĆ”s Maduro, y que durante los Ćŗltimos aƱos ha emitido distintos tipos de carnets, de acuerdo con todos los directores que han pasado por el cargo, y que no tienen un modelo especĆ­fico de documento, con rasgos de seguridad, que puedan ser comprobados por las autoridades espaƱolas.

El venezolano Armando Parejo es uno de los perjudicados ante toda esta situaciĆ³n. Tiene 72 aƱos y fue una de las personas afectadas por la incompetencia del Instituto Nacional de TrĆ”nsito Terrestre (INTT) venezolano. Tuvo que enfrentar un proceso penal donde se le acusaba de haber falsificado su permiso de conducir venezolano, y aunque al final la jueza que llevaba su causa entendiĆ³ que Ć©l era inocente, y hasta le ofreciĆ³ disculpas, se vio afectado econĆ³micamente y en su trĆ”mite para obtener la nacionalidad espaƱola.

Ā«Yo lleguĆ© a EspaƱa en 2018 y tramitĆ© el canje de mi licencia sin ningĆŗn problema. En abril de 2021 me llaman de la PolicĆ­a Nacional y me dicen que debo acudir con un abogado. Cuando acudĆ­ a la citaciĆ³n me dijeron que el documento era falso y me reseƱaron como si hubiese cometido algĆŗn delito. Mi licencia la habĆ­a tramitado en Venezuela en 2010, pero de la misma manera que lo hice desde que cumplĆ­ 18 aƱos. toda esta situaciĆ³n me hizo sentir muy malĀ», dijo el afectado.

Otra de las vĆ­ctimas de esta situaciĆ³n es el diputado venezolano Franco Casella, quien estĆ” en el exilio. En su caso, todavĆ­a tiene un proceso abierto donde tambiĆ©n se le acusa de haber falsificado su licencia de conducir y, de momento, tendrĆ” que esperar hasta septiembre, cuando tiene una audiencia ante un juez, para demostrar que no se trata de un documento falsificado, sino de una irregularidad por parte del organismo que emite los carnets en Venezuela.

Ā«Yo presentĆ© ante la ComisiĆ³n de PolĆ­tica Interior la idea de que la Asamblea Nacional venezolana, que es reconocida por el Reino de EspaƱa, emita un documento en el cual se explique a las autoridades espaƱolas que lo que ha sucedido con las licencias venezolanas es responsabilidad del INTT y que la responsabilidad no recaiga sobre los venezolanos, porque todo estos procesos afectan desde los procesos migratorios, la economĆ­a y hasta las oportunidades de trabajo que tienen todos los venezolanos, pero hasta ahora no se ha podido hacer nadaĀ», expresĆ³ el parlamentario.

Casella rechazĆ³ las declaraciones que hizo el embajador Ecarri, quien seƱalĆ³ que no habĆ­a causas contra venezolanos en los juzgados espaƱoles y que ninguno habĆ­a sido sentenciado, pues asegurĆ³ que, aunque en muchos casos los expedientes han sido archivados, hay venezolanos que sĆ­ han sido condenados y han tenido que pagar multas, porque al final todo depende del juzgado en el que sea debatida la causa.

Ā«Cada tribunal es un mundo y hay jueces espaƱoles que no conocen la realidad de todo lo que pasa en Venezuela, por lo que algunos han simplemente considerado que son los venezolanos los que falsifican los documentos, cuando la realidad es que el INTT en Venezuela ha emitido cinco tipos de licencias diferentes durante los Ćŗltimos aƱos, donde han utilizado distintas tintas y distintas impresoras y por lo tanto los documentos emitidos son diferentes, pero no quiere decir que sean falsos, sino que el organismo es incompetenteĀ», dijo el parlamentario.

De acuerdo con los datos obtenidos por un grupo de abogados, en la actualidad, en los juzgados espaƱoles hay mƔs de 700 procedimientos abiertos contra venezolanos; algunas causas son colectivas, pero en otras son individuales y son personas que son sometidas a procesos de juicio, en los cuales deben demostrar que los documentos que las autoridades espaƱolas consideran como falsos no es responsabilidad de ellos.

De momento, la Ćŗnica alternativa con la que cuentan las personas que estĆ”n afectadas judicialmente por esta situaciĆ³n, es solicitar ante el consulado venezolano, en manos del rĆ©gimen de NicolĆ”s Maduro, un documento donde certifican que los datos de sus carnets de conducir son verdaderos, pero eso no certifica la autenticidad de las licencias, y al mismo tiempo, para obtener este documento, deben pagar 50 euros a la representaciĆ³n consular.