Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el Pequeño Nicolás, saltó a la fama después de que se detaparan diversas estafas en el ámbito político en 2014. Entonces muchos lo consideraron un mentiroso, un engreído que lo único que quería era fama y popularidad en los medios. Desde 2017, ha sido procesado por estos delitos: falsedad documental, estafa en grado de tentativa y usurpación de funciones públicas y estado civil, revelación de secretos, cohecho impropio, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias.
Tras su periplo judicial, el Pequeño Nicolás concibió una nueva forma de mantenerse en las portadas: utilizar la prensa del corazón. Tres años después de todo esto, ¿qué ha sido del Pequeño Nicólás?
3SOBORNOS Y ENGAÑOS DEL PEQUEÑO NICOLÁS
Además de engañar a una parte de la clase política y de sus círculos de poder, el Pequeño Nicolás también realizó incursiones en el ámbito económico. Así, según el sumario de su caso, este joven negoció con empresas como OHL y Acciona mordidas para la gestión de negocios e inversiones actuando como un emisario del Gobierno.
Los engaños fueron parte de dinámica de movimientos en las altas esferas: llegó incluso a «estafar» al alcalde de Ribadeo (Galicia) al convencerle de que el recién coronado rey Felipe VI realizaría una supuesta visita a la localidad. Tal fue el éxito de su engaño que el alcalde de Ribadeo orquestó todo el protocolo de seguridad exigido y recibió a la comitiva, de la que solo formaba parte el propio estafador. Como resultado del acto, el jefe de la policía local fue expedientado.
