La abogada del mayor de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, ha cargado este miércoles contra el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, del que ha descalificado su labor como coordinador del dispositivo policial para el referéndum independentista del 1 de octubre de 2017, pues el «fallo» en la actuación de ese día fue de los tres cuerpos desplegados, esto es, policía autonómica, Policía Nacional e Instituto Armado.
En su segundo día de exposición del informe de conclusiones de la defensa, la letrada Olga Tubau ha puesto en duda el testimonio que prestó en el juicio Pérez de los Cobos cuando éste afirmó que que su labor era de mero coordinador y no de mando y que desconfiaba de Trapero desde días antes de la votación.
Por un lado, Tubau considera que la magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) Mercedes Armas expuso en el auto en el que ordenaba impedir el referéndum que era el coronel quien dirigía el operativo policial, por lo que se deduce, en su opinión, que le dio «trato de mando» sobre los tres cuerpos.
Por otra parte, la abogada ha recordado que Pérez de los Cobos declaró en el juicio que la designación por parte de Trapero del comisario Ferrán López para asistir a las reuniones de coordinación fue valorada «positivamente», ya que existía una «mala relación» entre el coronel y el mayor y porque el desarrollo de esas reuniones fueron en un «clima de absoluta normalidad y cordialidad».
NO SER DIPLOMÁTICO NO ES DELITO
Además, ha hecho hincapié en que «nadie hizo ningún reproche» ante el hecho de que Trapero delegara en López su presencia en las reuniones de coordinación a finales de septiembre. Ha subrayado que el mayor entonó en el juicio su ‘mea culpa’ por esta reacción, pero ha apuntado que «no tener hábiles dotes de diplomacia no significa una conducta delictiva».
Tubau ha recordado que López aseguró en la vista que en esos encuentros los Mossos informaron de sus planes para el dispositivo del 1-O, que era el envío de un binomio a cada centro de votación, mientras que Pérez de los Cobos dijo que no conocía esa información. «¿Es creíble que el coordinador no exija el diseño policial para impedir la votación?», se ha preguntado.
Contraponiendo uno y otro testimonio, con dos tesis completamente opuestas, la letrada ha concluido que «o bien el coronel conocía el dispositivo de Mossos, le parecía correcto y a pesar de poder tener alguna reticencia no dijo nada; o bien no conocía nada», algo que ve «absolutamnte imposible con la función de coordinación». «Si se hubieran levantado actas de las reuniones de coordinación, no estaríamos aquí», ha afirmado.
La abogada ha censurado que el coronel de la Guardia Civil haya hablado de «engaño torticero» y de «estafa» el dispositivo de los Mossos d’Esquadra y que en base a su declaración la Fiscalía acuse a Trapero de un delito de sedición y pida una condena de 10 años de cárcel.
«¿Se puede sostener que Ferrán López, que según el coronel le habría engañado y hecho creer que los Mossos iban a cumplir, alguien que ha traicionado los mandatos esenciales de la Constitución, ese traidor sea nombrado luego por las más altas instancias del Ministerio del Interior?», ha cuestionado en referencia a la designación del comisario como jefe de la policía autonómica tras la aplicación del artículo 155. «Esto no es sostenible», ha apuntado.
FISCALÍA NO HA CITADO A TESTIGOS DE LAS REUNIONES
Y si López y Pérez de los Cobos discrepan en sus versiones sobre lo que ocurrió en las reuniones de coordinación, Tubau se ha preguntado por qué la Fiscalía no ha citado a declarar en este juicio a otros mandos que también estuvieron en esas reuniones, como los exjefes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en Cataluña, Ángel Gozalo y Sebastián Trapote, respectivamente.
De igual modo, ha cuestionado la labor de Pérez de los Cobos durante la propia jornada del 1-O, cuando declinó la oferta de López de seguir el desarrollo de los acontecimientos desde el centro de coordinación central y los centros regionales previstos por los Mossos, lugares desde donde «habría visto las órdenes» que se iban dando y las solicitudes que iban haciendo las patrullas de la policía autonómica. «Fue más que una invitacion formal para una jornada excepcionalísima», ha explicado.
Y además, ha destacado que el coronel, que según el ya «desconfiaba de la lealtad de Trapero» y que dijo que si por él fuera le habría destituido, ese día del referéndum, viendo cómo se estaba desarrollando la jornada, ni se dirigió a la Fiscalía Superior de Cataluña, ni al TSJC ni al Gobierno central para pedir que «alguien hiciese algo» ante la supuesta inacción de los mossos desplegados.
«¿Alguien puede creer que si Trapero o los mandos de los Mossos estaban dando órdenes clandestinas diferentes al mandato judicial a un cuerpo formado por 17.000 agentes, nadie va a alzar la voz?», ha cuestionado Tubau.