El Papa Francisco ha alentado a los jóvenes a tener la valentía de ir contracorriente por el mundo: «No contra alguien, como hacen los victimistas y los complotistas, que siempre cargan la culpa sobre los demás; sino contra la corriente malsana de nuestro yo egoísta, cerrado y rígido, para ir tras las huellas de Jesús».
Así lo ha manifestado este domingo el Pontífice en su homilía de la misa en la solemnidad de Jesucristo y celebración de la XXXVI Jornada Mundial de la Juventud a nivel diocesano, según ha informado Vatican News.
En su homilía el Santo Padre reflexionó sobre dos imágenes, tomadas de la liturgia del día. La primera, basada en el Apocalipsis de san Juan y anticipada por el profeta Daniel en la primera lectura, está descrita con estas palabras: «Viene entre las nubes». Se refiere a la venida gloriosa de Jesús como Señor y como el fin de la historia. La segunda imagen es del Evangelio, Cristo está ante Pilato y le dice: «Soy rey».
En este sentido, el Papa ha invitado a los jóvenes a detenerse a contemplar estas imágenes de Jesús, mientras inician el camino hacia la Jornada Mundial del 2023 en Lisboa.
Asimismo, el Papa ha exhortado a los chicos y chicas de todo el mundo a profundizar en las visiones nocturnas, es decir, a tener ojos luminosos aún en medio de las tinieblas: «No dejen de buscar la luz en medio de las oscuridades que llevamos en el corazón y que vemos a nuestro alrededor».
«Elevemos la mirada desde la tierra hacia lo alto, no para huir, ¡no!, para vencer la tentación de quedar tumbados en el piso de nuestros miedos. Este es el peligro: que nos guíen nuestros miedos. No quedemos encerrados en nuestros pensamientos, compadeciéndonos de nosotros mismos», ha añadido.
Por otras parte, el Pontífice ha agradecido a los jóvenes en nombre de toda la Iglesia por los sueños que tienen, «cuando hacen de Jesús el sueño de sus vidas y lo abrazan con alegría, con un entusiasmo contagioso que nos hace bien».
En la misma línea, les ha agradecido «por las veces que son capaces de seguir soñando con valentía, por las veces que no dejan de creer en la luz aun en medio de las noches de la vida, por las veces que se comprometen con pasión para hacer del mundo más hermoso y humano».
«Sean libres, auténticos, sean la conciencia crítica de la sociedad. No tengan miedo de criticar. Nosotros necesitamos sus críticas. Tengan pasión por la verdad, para que con sus sueños puedan decir: mi vida no es esclava de las lógicas de este mundo, porque reino con Jesús por la justicia, el amor y la paz. Deseo que cada uno de ustedes pueda sentir la alegría de decir: ‘También yo soy rey con Jesús’. Soy rey, soy un signo viviente del amor de Dios, de su compasión y ternura», ha concluido Francisco.