Estas alitas de pollo al ajillo mucho más ricas que a la barbacoa

Da igual que chefs del nivel de Martín Berasategui o Dabiz Muñoz hayan subido el nivel gastronómico de España. La vanguardia está muy bien, pero en los restaurantes. En los hogares se apuesta por recetas sencillas y, sobre todo, rápidas. En esa ecuación encajan a la perfección estas alitas de pollo al ajillo. No son comunes, porque suelen usar otras partes de esta carne para esta elaboración, pero te aseguramos que el resultado es excepcional.

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Dorar las alitas

Lo primero que tienes que hacer es coger una sartén y ponerla a fuego medio o alto. Agrega mantequilla y un chorro de aceite. Cuando esté caliente incorpora las alitas de pollo separadas en mitades y previamente salpimentadas. Deja que se frían bien, lo cual te puede llevar en torno a diez minutos. Ten cuidado, porque saltan bastante. Ves dándolas la vuelta hasta cerciorarte de que están en su punto. Ahora te contamos el siguiente paso.