La mayonesa es una de las salsas más populares y consumidas en todo el mundo. Forma parte de muchos platos de la cocina española, como por ejemplo la tradicional ensaladilla rusa, que tanto nos gusta durante los meses de verano. Es un tipo de mezcla que se llama emulsión, y gracias a sus sabrosos ingredientes, realza los sabores y mejora cualquier alimento al que se le añade. Aunque su elaboración es aparentemente sencilla, es importante tener bien claras las proporciones para que el resultado sea perfecto, en sabor, textura y consistencia.
PROPORCIONES IDEALES PARA UNA MAYONESA
Estos son los ingredientes exactos, para preparar una mayonesa perfecta, bien ligada con el justo equilibrio de sabores:
- 1 huevo campero. Es importante que esté a temperatura ambiente.
- 250 ml de aceite de oliva de sabor suave o de girasol
- 1 cucharada de vinagre o de zumo de limón
- sal al gusto
PREPARACIÓN DE LA MAYONESA PERFECTA
Necesitaremos un vaso de batidora alto. Ponemos dentro el huevo, el vinagre (o limón, según prefieras) y la sal. A continuación vertemos el aceite y dejamos reposar, sin batir ni mezclar, durante 10 minutos. Se recomienda usar un aceite de sabor suave, de lo contrario la mayonesa puede quedar ligeramente amarga y demasiado intensa. Transcurrido ese tiempo introducimos la batidora y la apoyamos en el fondo del vaso. Encendemos y dejamos que se mezclen los ingredientes sin mover la batidora. Es el mejor truco para que no se corte. Una vez que la parte inferior emulsione y tome textura, ya podemos ir subiendo y bajando para terminar de mezclar el resto. Podemos añadir más aceite si queremos una salsa más espesa. Cuando esté lista, probamos, por si es necesario rectificar de sal o de vinagre.
