Los techos del cuartel ‘Capitán Guiloche’ del Ejército de Tierra en Madrid «escondieron» hachís

Los cuarteles del Ejército de Tierra esconden mucho más que armamento. Este es el caso de una de las dependencias militares que se encuentran situadas en Madrid, dado que uno de los soldado destinados en la base de ‘Capitán Guiloche’ del Ejército de Tierra le ha encontrado una «gran utilidad» a los techos de este organismo. Y es que, un militar destinado en dicho territorio parece ser que se ha dedicado a distribuir hachís por el cuartel, en particular, para sus compañeros de habitación, así como para los alojamientos cercanos al suyo. Además, mantenía el alijo escondido en un falso techo de su habitación e, incluso, utilizaba un peso que se encontraba en estas dependencias para medir las cantidades que vendía a cada soldado. Una vez descubierto, los Tribunales Militares han decidido condenar a este soldado a una pena de 4 meses de prisión por el delito de tráfico de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas. Es decir, que se le ha acabado el chollo a este soldado, lo que no está claro es si en los techos de este cuartel de Madrid continúan guardando hachís u otras sustancias en sus techos.

Los hechos se remontan a marzo de 2016 cuando un soldado, destinado en el cuartel de ‘Capitán Guiloche‘ del Ejército de Tierra, situado en Madrid, fue asignado a la habitación número 15 del módulo 3 y posteriormente a la número 13. Sin embargo, mientras que se hospedaba en estos alojamientos introdujo en dichas dependencias una sustancia que, cuanto menos, resulta sorprendente. Y es que, en el periodo que se alojó en estas instalaciones poseía una cantidad indeterminada de hachís. Y no solo eso, sino que, además, buscó la forma de esconderlo para poder almacenarlo dentro del cuartel en el que llevaba a cabo su servicio. Este soldado buscó un escondite alejado de las miradas, pero donde pudiera tenerlo cerca por si necesitaba usar algo de su alijo secreto de hachís.

No se sabe si los techos de este cuartel militar siguen escondiendo hachís

Este militar escondía esta sustancia en un falso techo de su habitación del cuartel «Capitán Guiloche» del Ejército de Tierra. Así, podía coger pequeñas cantidades de hachís para vendérselo a sus compañeros de barracón, u otros compañeros destinados también en estas instalaciones de las Fuerzas Armadas. Para llevar a cabo este tráfico de sustancias estupefacientes utilizó, según aparece recogido en la sentencia a la que ha tenido acceso MONCLOA.com, un peso digital «Smart Weight» que se encontraba entre sus pertenencias. Así, con este utensilio podía medir la cantidad exacta que le vendía a sus compañeros de cuartel y mantener controlado cuanto le quedaba de su alijo. Es decir, que este soldado se convirtió en una especie de «traficante» dentro de las dependencias del Ejército del Tierra. Parece que ser que ha decidido que sacarse todo un sobresueldo gracias a la venta de estas sustancias a sus compañeros militares.

Ahora, lo que deberán hacer los militares de este cuartel de ‘Capitán Guiloche’ será realizar toda una inspección de los techos de todas estas instalaciones. Todo ello para comprobar si todavía, a día de hoy, continúan quedando rastros de esta sustancia, de hachís, dentro de dichas instalaciones de las Fuerzas Armadas. Y es que, no se sabe si este militar dejó algo de su alijo en su escondite secreto. Lo que está claro es que esta cuestión no salió barata para el condenado, ya que una vez que sus superiores se dieron cuenta de sus prácticas, le cerraron el «chiringuito» y cortaron el grifo a la venta de hachís en el cuartel. Es decir, que se le acabó el chollo rápidamente a este soldado y todo por su poca vista a la hora de traficar con sustancias ilegales. Y es que, a este soldado le ha salido caro lo de intentar ganarse un sobresueldo y ha sido condenado por los Tribunales Militares, para quienes no han pasado desapercibidas estas prácticas ilegales realizadas por este militar.

EL SOLDADO DEL EJÉRCITO DE TIERRA FUE CONDENADO A 4 MESES DE PRISIÓN

Una vez fue descubierto, denunciaron la situación ante la justicia militar y a partir de ese momento comenzaron a investigar lo ocurrido. Así, los Tribunales Militares decidieron condenar a cuatro meses de prisión a este soldado por el delito de tráfico de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas. Así, a partir de ahora puede que no lleve a cabo estas prácticas o, por lo menos, no lo haga dentro de las dependencias militares y menos guardando el alijo dentro de los techos falsos estas instalaciones de las Fuerzas Armadas. Y no solo eso, sino que este soldado tuvo tan poca vista para llevar a cabo sus fechorías, su tráfico de hachís, que, encima, se lo vendía a sus compañeros militares. Todo un descuido por parte de este militar, quien por un tiempo se llegó a convertir en el traficante de sustancias estupefacientes del cuartel de ‘Capitán Guiloche’ del Ejército de Tierra que se encuentra situado en Madrid.