sábado, 14 diciembre 2024

Feijoo busca a la desesperada que Sánchez acepte un pacto para que gobierne la lista más votada

Las críticas no han tardado en lloverle al líder del Partido Popular, Alberto Núñez-Feijóo, después de que el gallego propusiera que gobiernen las listas más votadas, inicialmente en el plano municipal. Una propuesta del popular que ha sembrado la polémica política pero que, sin embargo, no es la primera vez que se escucha dentro del círculo de la política actual, habiendo sido el propio Pedro Sánchez, así como su equipo, los que en 2019 apostaron por esta posibilidad tras las elecciones generales que otorgaron a Pedro Sánchez la Presidencia de la Moncloa.

A pocos meses de las elecciones generales de 2023, los partidos políticos empiezan a mostrar sus cartas para convencer a los votantes españoles de confiar en sus siglas ante las urnas. Una situación que ha llevado al líder del Partido Popular, Alberto Núñez-Feijóo, a proponer un proyecto de lo más inesperado: que sea la lista más votada en las urnas la que consiga gobernar, sin necesidad de llegar a acuerdos para formar Ejecutivo. Una posibilidad que eliminaba del mapa los gobiernos de coalición como el conformado actualmente en la Moncloa por Podemos y PSOE.

Así pues, el líder gallego de los populares ha destacado que sea el partido que «mayor respaldo popular directo logre en las urnas» el que llegue a gobernar. Una situación que ha matizado el gallego, definiendo que esto podría producirse, al menos en un primer momento, en las elecciones municipales. Un plan que, según Feijóo, conseguirá asegurar la «democracia de calidad» en las instituciones públicas españolas.

Una propuesta que pronto ha recibido las críticas del resto de partidos. Especialmente, aquellos que actualmente conforman el Gobierno de coalición. Entre ellos, la propia portavoz del Ejecutivo nacional, Isabel Rodríguez, que no ha dudado en destacar que Alberto Núñez-Feijóo se ha quedado «solo» en el planteamiento porque «propios y extraños han salido a la contra de una decisión unilateral» ante el sistema de las urnas.

«El PP se olvida de lo básico, que es el predicado de la frase: que gobierne la lista más votada si gano yo, que eso es lo que le falta añadir al señor Feijóo» destacaba la ministra Pilar Alegría. Unas críticas que también se han repetido dentro de Podemos, desde donde han asegurado que el único plan del líder gallego es «sacar a Podemos de la ecuación y volver al bipartidismo».

A PEDRO SÁNCHEZ SÍ LE GUSTABA EL «BIPARTIDISMO» DE FEIJÓO

Sin embargo, parece que estas críticas del Gobierno socialista, y especialmente del equipo de Pedro Sánchez, a la propuesta del líder de los populares demuestra, no sólo la intención del socialismo de rechazar cualquier iniciativa del Partido Popular ante las elecciones, sino también la aparente «falta de memoria» del PSOE. Al menos, en lo que se refiere a los últimos años.

Y es que, mientras que ahora Pedro Sánchez rechaza las palabras y las propuestas de Feijóo, era su propio equipo socialista el que presentaba un proyecto similar durante las elecciones generales de 2019. Unas elecciones que ganaba, aunque no por mayoría, el candidato socialista, y que otorgaban el palacio de la Moncloa al partido socialista.

«El gran problema de España es el bloqueo; algo por lo que se debe dejar gobernar a la lista más votada» destacaba en 2019 el entonces secretario de Organización del Partido, José Luis Ábalos. Unas palabras que también apoyaba el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que solicitaba al resto de líderes de partidos políticos que optaran por permitir a la formación más votada que alcanzase el Ejecutivo sin necesidad de llegar a acuerdos para formar Gobierno.

Palabras que ahora parecen haber sido olvidadas por los socialistas, que defienden ahora el sistema constitucional y tradicional de las urnas, frente a la propuesta del Partido Popular. Una propuesta que socialistas y resto de partidos de la izquierda consideran que sólo ayudaría a la formación de Feijóo, según destacan las últimas encuestas realizadas, y que, por tanto, supondrían la estabilización del PP en el poder. Algo que, sin embargo, no parecía ser tan «molesto» a formaciones como el PSOE, cuando era Pedro Sánchez el que lideraba los sondeos y encuestas electorales en 2019.