El invierno ha llegado con su frío penetrante, y toca hacer todo lo posible por pasar una estación agradable y lo más cálida posible. El problema es que muchos consejos para mantenerse caliente durante los meses de frío pasan por alto un detalle esencial: la necesidad de salir al exterior y enfrentar las bajas temperaturas. Por ello, exploraremos minuciosamente cómo aprovechar la ciencia de la termorregulación para mantener el cuerpo, especialmente las manos y los pies, confortablemente cálidos incluso en pleno invierno.
5PIES CALIENTES

En cuanto a los pies, más allá de posibles patologías, la lógica es análoga. La prioridad es no perder calor, por lo tanto, es fundamental evitar andar descalzo. Incluso en casa, se recomienda mantener los pies siempre calzados (o en su defecto, usar calcetines). A pesar de la desaprobación común sobre dormir con calcetines, es una práctica beneficiosa si experimentamos enfriamiento en los pies durante la noche.