Las elecciones autonómicas vascas celebradas este domingo han finalizado con un regusto agridulce para las principales formaciones: el PNV celebraba su enésimo y esta vez inesperado triunfo en votos, pero su dinámica de votos es negativa. EH Bildu se quedó con la miel en los labios al no conseguir una victoria que hubiese sido calificada de «histórica», pero tiene motivos para celebrar su crecimiento.
El PSE-EE sube y se mantendrá en el Gobierno Vasco, pero sus números se quedan a años luz de los que lograba antaño. El PP sube, pero ni consigue ser decisivo en la gobernabilidad ni se consolida como la única fuerza conservadora y estatal en el Parlamento Vasco, ya que Vox se mantiene por sorpresa aunque los de Santiago Abascal sufren que la Cámara sea hegemonizada por el voto nacionalista vasco.
Sumar, por su parte, irrumpe en el Parlamento mientras se queda fuera Podemos, pero es evidente que el ‘yolandismo’ no está siendo capaz de evitar el derrumbe del espacio de la izquierda confederal. El único que no tiene nada que celebrar es Podemos, sin escaño pese a haber ganado las generales de 2016 en el País Vasco.
PODEMOS PIDE AL PSOE QUE APOYE A EH BILDU
Las elecciones vascas podrían haber ejercido como palanca para que Podemos comenzase a recuperarse en su particular pulso con Sumar, que obtuvo 1 escaño mientras los morados se quedaban fuera en el territorio autonómico en el que tienen mejor implantación, la candidata regional más valorada (Miren Gorrotxategi) y la líder orgánica más afín a Ione Belarra (Pilar Garrido).
El Diario Red que dirige Pablo Iglesias calla sobre el desplome morado y solo muestra su enfado porque el PSE-EE no articule un Gobierno progresista liderado por Euskal Herria Bildu, que siempre ha gozado de gran sintonía con el exvicepresidente.
«Con los resultados electorales todavía calientes, somos conscientes, sin embargo, de que lo más probable es que las dirigencias del PNV y del PSE hagan oídos sordos a la voluntad popular expresada en las urnas y repitan el esquema de gobierno de coalición de derechas que se configuró durante toda la pasada legislatura», editorializan.
Dice el periódico controlado por Iglesias que si PNV y PSE renuevan Gobierno «será pertinente volver a reflexionar sobre los mecanismos que hacen posible violentar mediante presiones externas a las cámaras parlamentarias la cristalización de determinadas mayorías emanadas de la decisión democrática de la gente».
Recuerda Diario Red que «este fenómeno político ya lo vivimos en el ámbito del conjunto del Estado cuando se generó una gran inestabilidad política, con tres repeticiones electorales y la primera moción de censura exitosa de nuestra democracia reciente, mediante la prohibición por parte de poderes no democráticos de la conformación de un gobierno de coalición entre PSOE y Podemos aunque hubiese una mayoría parlamentaria suficiente para ello en todos y cada uno de los hemiciclos que se constituyeron desde las elecciones generales del 20 de diciembre de 201».
Los de Iglesias señalan que «la forma de implementar una cláusula de exclusión antidemocrática como esta es, obviamente, a través de los poderes mediáticos y de la percusión sobre la opinión pública de un determinado relato cuyo único objetivo es el de excluir a determinadas fuerzas políticas de la gobernabilidad independientemente del resultado electoral que éstas hayan obtenido».
EL PNV SE PREPARA PARA GOBERNAR
Andoni Ortuzar, presidente del PNV, barruntaba este domingo que se mantendrán en el poder: «El PNV ha ganado las elecciones. Agradecemos la confianza de la sociedad vasca y el apoyo popular recibido. No vamos a defraudar la confianza otorgada (. . .) El Gobierno va a estar liderado por el PNV y será plural».
Imanol Pradales, candidato de los jeltzales y previsible futuro lehendakari, también mostró su felicidad: «Hemos ganado las elecciones y quiero dar las gracias por ello. Cómo ganadores de las elecciones intentaré formar un Gobierno con personas de solvencia contrastada».
Pello Otxandiano, por su parte, aseguró que los votantes que se han quedado fuera del Parlamento (en relación a los de Podemos) encontrarán su voz en Euskal Herria Bildu.
