Maya (UPN) se niega a reprobar a los ‘concejales de la ikurriña’ de San Fermín

  • Maya se negó a reprobar a los concejales nacionalistas que protagonizaron un incidente en San Fermín.
  • El alcalde de Pamplona se ha visto con la presidenta Chivite, que por ahora no se sienta con Esparza.
  • Algunos de sus movimientos me miran con suspicacia en Unión del Pueblo Navarro.
  • Enrique Maya ha escogido un perfil político propio dentro de UPN. El alcalde de Pamplona ha decidido no apostar por la confrontación directa con formaciones como EH Bildu o Geroa Bai, estrategia que no comparte el líder de su partido, Javier Esparza.

    La anécdota más llamativa de los últimos días en la política navarra es la decisión de Maya de abstenerse junto a una compañera de UPN ante la reprobación de tres concejales nacionalistas que protagonizaron un forcejeo con la policía local antes del chupinazo de San Fermín.

    Una de las que intentó desplegar la ikurriña en el balcón del Ayuntamiento de Pamplona, Itziar Gómez, fue miembro de Herri Batasuna y se ha convertido en consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente por Geroa Bai dentro del Gobierno de la socialista María Chivite. Los otros dos ediles, Joxe Abaurrea y Maider Beloki, pertenecen a Euskal Herria Bildu.

    LA OPOSICIÓN ACUSABA A UPN DE UTILIZAR «TRIQUIÑUELAS»

    La marcha de dos concejales de la oposición al Gobierno de María Chivite dejó en una mayoría temporal dentro del Ayuntamiento de Pamplona a Navarra Suma. Formaciones como EH Bildu acusaron a UPN de «triquiñuelas» por llevar a pleno la reprobación de tres concejales de la oposición.

    Maya y su compañera María Caballero se abstuvieron para respetar la mayoría del consistorio, que desde el 28-M está en manos del centro-izquierda: EH Bildu, PSN y Geroa Bai. Cierto es que la decisión socialista de no pactar con la izquierda abertzale posibilitó el retorno de Maya a la alcaldía.

    MAYA SUFRE SU MINORÍA

    A UPN, que lidera Navarra Suma, se le puede hacer eterna la legislatura en Pamplona. Y es que Enrique Maya ha perdido las primeras votaciones en pleno de la legislatura. Los tres grupos de la oposición instaron «al alcalde Maya a que restituya con carácter inmediato el servicio de patrullaje de Policía Municipal en bicicleta».

    El PSN también apoyó una moción de EH Bildu en apoyo del programa Skolae, que ha sido galardonado con el Premio UNESCO de Educación a niñas y mujeres 2019 tras las duras críticas de formaciones como UPN. La oposición también sacó adelante la continuidad de los ‘foros del barrio’.

    LA DIFERENCIA ENTRE LAS DOS ESTRELLAS DE UPN

    María Chivite recibió a Enrique Maya en su despacho el pasado 3 de septiembre. Se da la paradoja que la presidenta socialista ha querido reunirse antes con el alcalde de Pamplona que con el líder de UPN, Javier Esparza, con el que no tiene demasiado feeling a nivel personal.

    UPN
    Chivite en el Parlamento foral.

    Esparza ha denunciado que Chivite se ha negado a recibirle: «He llamado en cuatro ocasiones y no se ha querido sentar, creo que es evidente el mensaje. Navarra Suma pidió reuniones con la presidenta del Gobierno y se nos dijo que no. Hemos pedido una reunión como UPN a la secretaria general del PSN y nos dicen que no».

    El líder regionalista afirma que «los ciudadanos quieren diálogo, quieren que nos sentemos, que Chivite y Esparza se sienten en una mesa y hablen de lo que preocupa a los ciudadanos, del IRPF de las madres, de derogar o no el decreto del euskera, de la ley de símbolos, del tren de alta velocidad, del Canal de Navarra, de las víctimas del terrorismo de ETA».

    LA PENÚLTIMA POLÉMICA DE MAYA

    Enrique Maya se refirió al norte de Navarra como la «zona vasconavarra» para enfado de ciertos sectores de UPN y hace unos días matizó sus palabras: «En el norte no hay una coincidencia entre el límite territorial de Navarra con Euskadi. En el límite de lo vasco no coinciden las líneas. La historia ha sido así».

    El alcalde no se corta sobre este asunto: «A ver quién va a decir que en el Baztan, que en toda esa zona cercana a los Pirineos, las personas no se sienten vascas desde el punto de vista cultural. Yo estuve el otro día en un pueblo de la montaña de Navarra escuchando a la coral, cantaban en euskera y era una cosa absolutamente lógica que lo hicieran, porque es una tierra en la cual el euskera tiene un peso».

    LA MANCOMUNIDAD EN JUEGO

    El próximo 26 de septiembre está convocada la asamblea de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. UPN aduce que EH Bildu ha retrasado la convocatoria de forma «ilegal» porque «ha incumplido los plazos. El presidente y el resto de órganos de la Mancomunidad están ejerciendo fuera del plazo legal que tienen para ejercer».

    Según los regionalistas, la coalición abertzale ha retrasado el inicio de la legislatura en este órgano comarcal que da servicios de agua potable, residuos o transporte público a 365.000 personas, lo que supone más de la mitad de la población de la Comunidad Foral de Navarra, y que cuenta con un presupuesto anual de 120 millones de euros.