El presentador de ‘El Hormiguero’ ya ha tomado por costumbre lanzar pullitas al Ejecutivo, gesto que siempre genera polémica que a su vez no parece asustarle. Este miércoles, Pablo Motos hizo un nuevo comentario que ya califican de «zasca» en redes.
En contexto de la futura vacuna para el coronavirus, Pablo Motos dijo: «¿Qué pasa ahora con los antivacunas? ¿No las quieren? Que no se la pongan. Los antivacunas ahora no se la pueden poner. Es como si el presidente del Gobierno no se fía de alguien y luego le nombra vicepresidente«, soltó Motos, acompañado de un duro golpe de sonido para enfatizar, en clara referencia a cuando Pedro Sánchez dijo que no dormiría tranquilo con Pablo Iglesias en el Gobierno.
Además, criticó la claridad del líder del Ejecutivo a la hora de informar sobre las fases de la desescalada: «No lo han conseguido entender ni Los Lobos de Boom”, dijo. Zanjó el tema aseverando que “estamos en un caos”.
Las redes no dan crédito y ríen la gracia: «Pablo Motos está desatado», «Pablo Motos quiere dejar de trabajar» o «me da la impresión de que no le va a durar mucho el programa» son algunos de los comentarios que hicieron los espectadores. Por otro lado, hay personalidades que no celebran esta cruzada del presentador, como el comentarista de actualidad Bob Pop (Late Motiv): «¿Que no ha ido Pablo Motos a la sesión de control?», tuiteó sarcásticamente este miércoles.
PABLO MOTOS ATIZA TAMBIÉN A FERNANDO SIMÓN
Pero en esta nueva tanda, el epidemiólogo Fernando Simón ha acabado por resultar herido, tras varios ‘piropos’ de Motos: “Ese hombre parece que lleva varios días durmiendo en un coche” y que “se le ha ido quedando la voz más aguda” hasta el punto que ahora “cuando habla se giran los delfines”, así aludió el famoso al aspecto y cualidades físicas de uno de los expertos al frente de la crisis.
Anteriormente, Motos criticó al Gobierno por no haber hecho obligatorio el uso de las mascarillas, y haber enviado mensajes contradictorios o difusos al respecto. Este miércoles, Fernando Simón respondió a una pregunta que justo iba encaminada a tratar la misma cuestión.
Simón explicó que, aunque su uso es altamente recomendado, existen reticencias a la hora de promover la obligatoriedad del uso de las mascarillas, porque existen excepciones y casos especiales que dificultan mucho imponer una norma como esa: “No todo el mundo puede usarla, como personas con problemas respiratorios, otras sufren crisis de ansiedad cuando las utilizan, hay otros profesionales que por su nivel de alta actividad física pueden no tener la opción, con los niños no es fácil que las usen correctamente… Con lo cual, una norma con todas estas excepciones, que en muchos casos son difíciles de probar, es complicada”, explicó.
