Euskadi no se plantea «un confinamiento como el de marzo»

Dice que el sector de automoción está un poco «más tranquilo» pero «no hay que bajar la guardia» y seguir con planes Renove en próximos años

La consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, ha afirmado que en otoño se intensificará la labor de rastreo de posibles contagios que se viene realizando» para evitar «un confinamiento como el de marzo».

En una entrevista a Onda Vasca, Tapia también ha afirmado que no sabe si volverá a estar en el nuevo Gobierno vasco y será el Lehendakari, Iñigo Urkullu, «el que tendrá que decidir con quién quiere estar acompañado».

Ante las medidas previstas por el Gobierno vasco ante la posibilidad de una nueva segunda oleada en otoño, ha indicado que no se plantean el escenario de un nuevo confinamiento.

«Desde que finalizamos la desescalada nos planteamos que llegaría una situación complicada con rebrotes y cómo hacer frente a eso. Desde el principio decidimos controlar la zona del rebrote y el área adyacente y debemos seguir en esta línea, intensificar el trabajo con actuaciones quirúrgicas, sea en el ámbito del ocio, del transporte o trabajo, donde por cierto no se están produciendo los rebrotes», ha apuntado.

En este sentido, ha afirmado que ahora no se está esperando «a que los casos vengan a los hospitales», sino adelantarse y «buscar los contagios» donde se ve que se pueden producir porque se ha detectado un foco.

Por lo tanto, ha indicado que se está «fortaleciendo la red de rastreo» que hay y en otoño ese trabajo «será más intenso». «Pero ahí va a seguir estando la posibilidad de que no vayamos a un confinamiento como el que tuvimos en marzo, no nos planteamos ese escenario», ha señalado.

Según ha destacado, supone un «esfuerzo enorme» a los profesionales sanitarios, pero está demostrado que hay que trabajar «en la dualidad de protección de la salud y de la actividad económica». «En el equilibrio de esa dualidad está el gran reto de toda la sociedad vasca este otoño, no sólo del Gobierno Vasco», ha añadido.

AJUSTES

Ante los anuncios de ajustes de varias empresas vascas, Tapia ha aludido a la necesidad de trabajar en el ámbito tripartito y ha señalado que a este tipo de problemas hay que «darle soluciones que sean entre la parte empresarial, trabajadores y la administración como colaboradora».

«Desde ese punto de vista, el Gobierno está dispuesto a poner toda la carne en el asador para poder llevar adelante diferentes tipos de soluciones», ha añadido Tapia, que ha recordado que desde el Parlamento vasco también se pronunció por unanimidad a favor de una «empresa más inclusiva y participativa» donde «todos tengan algo que decir» y exista «una flexibilidad desde muchos puntos de vista».

Tapia ha manifestado que la Administración tiene que ayudar «con las herramientas que tiene, pero de una forma más intensa todavía», desde el punto de vista de la «innovación que hay que introducir» y trabajar «cadenas de valor más cercanas a lo que había en este momento». Además, ha asegurado que no se puede olvidar la «internacionalización» pero «hacerla de una forma un poquito diferente».

Asimismo, cree que hay que seguir haciendo inversiones empresariales «para estar en punta de lanza» y hay que continuar teniendo las «infraestructuras necesarias», y no solo se ha referido al transporte, sino también al 5G.

Ante su planteamiento de que se pueden tomar otras medidas como reducción salarial para evitar otras más drásticas como despidos, ha apuntado, por ejemplo, la posibilidad de crear una bolsa de horas o proceder a una reducción salarial en este momento «en el que la situación es problemática» con el objetivo de que la empresa «salga de esta situación y vuelva a estar en situación de ganancia, para, en este momento, recuperar salarios». También ha destacado que se pueden utilizar las horas para «formación para el futuro».

«Hay modelos en los que los trabajadores están participando en momentos buenos y malos y hay que adoptar ese tipo de soluciones, ponerlas sobre la mesa y ser muy conscientes de que aquello que hacemos en un momento malo como el de ahora, en el que hay que apretarse el cinturón, en el momento en el que la situación vuelve a ser de ganancias y la empresa tenga unos resultados no ya aceptables, sino muy buenos, desde luego la participación de los trabajadores en esos resultados debe ser acorde al esfuerzo que se hizo en momentos malos», ha añadido.

Tapia ha afirmado que hay sectores «relevantes» que se encuentran en situación complicada, pero hay ámbitos como el de las renovables, redes inteligentes y otras campos en los que «también puede haber buenas noticias».

AUTOMOCIÓN

Por otra parte, ante el aumento de la venta de vehículos un 34% en julio, ha indicado que un Plan Renove como el puesto en marcha «siempre actúa sobre la demanda».

Según ha explicado, el objetivo era «doble», por una parte, conseguir que se vendan más coches y «animar un poco el sector de la automoción» y, por otro lado, ayudar a reducir emisiones de CO2.

La consejera ha manifestado que el sector de la automoción, en general, ya venía «un tanto tocado» por la apuesta que se hizo «por hacer desaparecer el diesel de repente», que supuso un «tsunami», y «se añadió una segunda ola con la pandemia».

Tapia ha asegurado que el sector de automoción sigue «preocupado» pero no significa que esté «parado» y está «trabajando por ser competitivo en el futuro». «Y eso significa trabajar en nuevos combustibles, en nuevas formas de producción, muchísimo más digitales, materiales mucho más ligeros en este momento, hay que trabajar el vehículo más autónomo, más conectado con las infraestructuras y entre vehículos», ha añadido.

Según ha indicado, el sector de automoción está, en estos momentos, «ocupado en actuar en todas esas líneas» y ha insistido en que haber puesto en marcha el Plan Renove ha supuesto «un acicate para aumentar la demanda» y, por ello, cree que el sector «está un poquito más tranquilo» que en abril de este año, pero «no hay que bajar la guardia» y hay que continuar «en el mismo sentido, con planes Renove no solamente este año sino en los próximos años».

Tapia ha afirmado que reducir emisiones CO2 «no se hace de la noche a la mañana» ni «con un único tipo de vehículo» y se trata de incentivar el consumo en automoción, tanto en híbridos como en eléctricos, pero también de los vehículos de gasolina y de gasoil porque esos nuevos vehículos, con nuevos motores, «han reducido muchísimo las emisiones.

La consejera ha manifestado que hay que trabajar en la «neutralidad tecnológica», de manera que no se debe hacer «una apuesta del 100% por uno de los vehículos» sino «tratando de incentivar todo tipo de vehículos» e incluso otros que pueden ser a gas o con cualquier otro elemento que pueda suponer esa reducción de emisiones de CO2.

Tapia cree que a la gasolina y al gasoil todavía le quedan años y ha indicado que los expertos apuntan que, «como mínimo hasta 2050», habrá un mix de todo tipo de vehículos, aunque ha apuntado que hay que ir a una electrificación y a reducir emisiones, pero cree que todavía hay que continuar haciendo inversiones en vehículos de combustión interna. Además, considera que el hidrógeno va a tener «también su papel» y los vehículos de gas que no provienen de combustible fósil también supondrán una «transición relevante».

Por lo tanto, cree que hay que seguir trabajando en todo tipo de motores y cree que Euskadi «puede y debe hacer una apuesta en ese sentido». «Y ser conscientes de que, cuando hacemos una apuesta por un vehículo eléctrico, se supone que también la energía tiene que ser renovable, no es suficiente con adquirir ahora un vehículo eléctrico y pensar no tengo emisiones de CO2, no es cierto porque las tenemos indirectas porque la energía que consumimos no es renovable 100%», ha manifestado.