viernes, 13 diciembre 2024

Galicia dice que «el ocio nocturno está cerrado» en riesgo extremo

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha declarado este viernes que el «ocio nocturno está cerrado como tal» en los niveles máximo de restricciones y alto y lo que pueden abrir, ha aclarado, son los locales de este sector como «el resto de la hostelería», con su horario. Es decir, pueden funcionar como si fuesen cafeterías aunque son discotecas, pubs o salas de fiestas.

«Lo que se dijo es que si un local de ocio nocturno, su terraza exterior, la quiere usar como hace el resto de la hostelería, puede utilizarla en este caso, porque es una terraza de hostelería. El ocio nocturno está cerrado en los niveles máximo y alto», ha zanjado.

El DOG-bis recoge la autorización para que estos establecimientos a que abran con el horario y el aforo de la hostelería, eso sí, solo en los exteriores –solo se puede acceder al interior para acudir al cuarto de baño, explicó el conselleiro–. Los restaurantes y cafeterías de estos ayuntamientos pueden abrir también en interior, con un 30 por ciento de capacidad en el caso de los de nivel máximo y con un 50 por ciento en el grupo de incidencia alta.

El consumo en estos locales como discotecas será exclusivamente en terrazas y sentado en mesa. Se consideran terrazas al aire libre todos los espacios exteriores no cubiertos o todo el espacio que, estando cubierto, esté rodeado por un máximo de dos paredes o muros. El DOG señala que no estará permitida la colocación de barras para consumo en ellas. La ocupación máxima será de diez personas por mesa o agrupación de mesas y cerrarán a la 1.

En declaraciones en Ourense, Julio García Comesaña ha manifestado que permitir que los ayuntamientos en riesgo máximo por la incidencia de casos covid-19 puedan abrir la hostelería y las terrazas del ocio nocturno es una forma de «respetar una actividad tan importante».

Según esgrimió, «los contagios no se producen en el ámbito de la hostelería», por lo que ya llevaban tiempo trabajando en la posibilidad de no fuese necesario cerrar el interior de la hostelería con una «herramienta» que garantizase «no estar contagiados o no transmitir el virus y esa herramienta es la vacunación».

Así, también ha justificado que los ayuntamientos en riesgo máximo puedan continuar con la hostelería abierta, con los aforos reducidos al 30%. «Es cierto que sí hay un número de contagios importantes asintomáticos, que no lo saben, el riesgo de que vayan a un local de hostelería y contagien a otras personas está ahí», ha admitido para indicar que por ello se ha tomado la medida de solicitar la pauta de vacunación completa, tener superada la enfermedad o mostrar «una prueba negativa reciente».

«Poniéndonos en el lugar de los hosteleros», ha apuntado Comesaña, «nos pareció oportuno introducir estos elementos», para hacer compatibilizar el «mantenimiento de esta actividad tan importante».

Con todo, ha advertido que estar vacunado «no garantiza no contagiarse», haciendo un llamamiento a la prudencia y a mantener los límites de aforo. «La posibilidad de contagio existe y queremos ser prudentes,», ha manifestado antes de apostillar que «frente al cierre de la hostelería creo que el escenario de poder abrir con ese requisito está orientado a respetar una actividad importante y al mismo tiempo garantizar la seguridad de los pacientes y de los trabajadores».

EXPLICACIONES DE FEIJÓO

Feijóo ha destacado que (en general) se pueda mantener la actividad porque el 95 por ciento de los mayores de 40 años está inmunizado con la doble dosis y el 60 por ciento tiene al menos una vacuna. Con todo, volvió a lamentar que el número de vacunas ahora disponible sea «insuficiente», aunque destacó que la vacunación «sigue avanzando».

«Es compatible el ocio nocturno con PCR o certificado de vacunación, y cumpliendo el aforo y el protocolo del ocio nocturno. Iremos poco a poco equilibrando las vacunas y las capacidades de ocio nocturno. Pensamos que es una solución razonable, sin vacunas no podría abrir en ningún lado», ha esgrimido Núñez Feijóo.

TEST DE ANTÍGENOS

Por otro lado, Comesaña ha confirmado que se sigue trabajando para que los test que se venden en farmacia y que se pueden adquirir sin receta se puedan incorporar ahora al sistema del Sergas, no solo para que sirvan para acceder a locales, sino también para poder funcionar como punto de partida para rastreos tras localizar, en su caso, positivos.

En todo caso, ha indicado que estas pruebas que a priori no tienen supervisión deben realizarse conforme a un protocolo, en determinadas condiciones, y registrarse en el momento y con unos datos concretos. Por ello, se está trabajando en un sistema que «cuando esté cerrado, la idea es poder sumarlo» a la cadena diagnóstica del Sergas, además de que sea utilizado en hostelería.

Además, preguntado por si el certificado de vacunación o test negativo también es necesario los trabajadores de los establecimientos, ha recordado que la idea de pedir estas credenciales es por el «riesgo» de los usuarios de contagiar a la hora de consumir y quitarse la mascarilla. «Evidentemente, un trabajador de un local que está permanentemente con mascarilla, este requisito, en su caso, no es imprescindible», ha apuntado.

Comesaña también ha recordado que, por edad, el colectivo de trabajadores de la hostelería está siendo vacunado y que, en todo caso, con llevar puesta la mascarilla todo el tiempo, en este caso no se hace necesaria esta credencial que se pide a los clientes.