Este es el tomate frito que no deberías comprar según la OCU

Tanto la demanda como la oferta de tomate frito es muy alta. El ritmo de vida que llevamos y los hábitos de consumo, hacen que los alimentos envasados y procesados le ganen cada vez más terreno a la preparación de muchos alimentos de forma natural. El tomate frito es uno de ellos. Sin embargo, a pesar de que todas las grandes cadenas de supermercados tienen una amplia variedad de esta salsa, no todas las salsas de tomate son iguales según la OCU. Repasamos las que según la organización son peores y vemos los motivos.

Tomate frito con aceite de oliva extra Ibsa

tomate frito con 15 de aceite de oliva virgen extra ibsa Moncloa

La conservera leonesa Ibsa tiene dos productos valoradores por la OCU, que aparecen en su listado de salsas de tomate. El tomate frito Ibsa sin azúcares añadidos tiene una «muy buena valoración nutricional» y está elaborado sólo a partir de tomate fresco, escaldado y cocinado con aceite de oliva. Como se prepara a fuego lento, los azúcares naturales del tomate, le dan el dulzor característico al producto sin tener que añadir nada más. Eso no pasa con el tomate frito con aceite de oliva extra, que está peor valorado por la organización de consumidores y usuarios.