Alberto Garzón están empezando a ponerse nervioso al ver que Yolanda Díaz se resiste a incluirle en su nueva plataforma. El ministro de Consumo no tiene demasiado claro cual será su futuro político de cara a las elecciones nacionales que tendrá lugar en noviembre de este año. En Unidas Podemos no quieren ni oír hablar de este político debido a su «deslealtad». Su esperanza estaba puesta en la Sumar junto a Yolanda Díaz, pero la ministra de Trabajo se resiste a hacerle un hueco dado que no quiere un perfil de este corte en su formación. Sin embargo, Alberto Garzón no cesa en sus esfuerzos de intentar allanar su futuro en Sumar y está probando todas las alternativas que se le ocurren. La última ha sido proponer una mesa de todos los partidos que quieran participar en un proceso de confluencia de Sumar. El titular de Consumo está desesperado por sobrevivir políticamente y sobre todo por mantener su sueldo público.
Las elecciones están cada vez más cercanas y el ministro de Consumo ha decidido comenzar a gastar sus últimas balas. Por ello, la dirección de Izquierda Unida y, en concreto, Alberto Garzón, ha decidido hacer pública la línea que seguirá su formación de cara a las elecciones generales. Su idea es acudir con Sumar, pero en vista de que Yolanda Díaz no quiere hacerle un hueco, ha optado por una alternativa, la construcción de un proyecto político liderado por la ministra e integrado por todas las formaciones de izquierda que quieran formar parte de él. Aunque ha puesto una condiciones y que este proyecto debe seguir tendiendo lazos a los colectivos sin adscripción partidista y que su militancia debe contar con más participación dentro de Sumar.
la última bala de alberto garzón es un proyecto político con todas las formaciones de izquierda liderado por yolanda díaz
El ministro de Consumo ha decidido apostar por esta vía, dado que sabe que, probablemente es uno de los pocos escenarios, por no decir el único, en el que podría acudir de la mano de Sumar a la llamada a las urnas de noviembre. Antes que optar por esta alternativa ya ha gastado otras balas antes que no han servido de nada. Desde compartir todas y cada una de las medidas e iniciativas que ha llevado a cabo la ministra de Trabajo, salir en su defensa cada vez que se ha presentado la oportunidad, tratar de colarse en todos los proyectos que ha llevado a cabo, como la lista de la compra, con el fin de trabajar codo con codo y que Díaz pueda ver su valía. Hasta someterse a la vicepresidenta la allanar su futuro en Sumar. Sin embargo, ninguno de estos movimiento le han sido útiles y ahora apuesta por una coalición de varias formaciones.
La relación de Alberto Garzón con Unidas Podemos también ha propiciado que estas acciones. Y es que, sabe que no tiene ningún tipo de futuro junto a la formación morada debido a su deslealtad que es conocida por todos desde ese abril de 2019 que se puso a negociar con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, su apoyo externo a un Gobierno en solitario del PSOE por su cuenta y a espaldas del exvicepresidente del Ejecutivo Pablo Iglesias, quien lideraba Unidas Podemos. Ya entonces les pareció a los dirigentes del partido una «deslealtad absoluta» ver que Garzón quisiera garantizarse el escaño con un apoyo externo de Izquierda Unida al PSOE al margen de Unidas Podemos. Desde ese momento, el equipo de Iglesias le cogió la matrícula y avisó a todos los navegantes que había que alejarse de este ministro. Y a día de hoy esa leyenda se ha agrandado hasta el punto de que nadie en todo Unidas Podemos le quiere en su lista.
Lo único que busca el ministro de Consumo es tratar de sobrevivir en la vida política. Y con Izquierda Unida de capa caída y las puertas cerradas de Unidas Podemos la situación se complica para el político. Así, está dedicando todos sus esfuerzos en tratar de convencer a Yolanda Díaz. Tal es el punto de desesperación al que ha llegado que hasta ha dejado de lado sus competencias como ministro de Consumo para centrarse en su futuro político en Sumar.
ALBERTO GARZÓN SE CENTRA SOLO EN ALLANAR SU FUTURO POLÍTICO EN SUMAR
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, sigue sin hacer nada. Fuentes de Unidas Podemos aseguran que el diputado no ha movido el presupuesto con el que cuenta su ministerio porque no tiene muy claro en qué gastarlo. No hay quejas sobre si se deja más o menos dinero público en subvenciones, pero sí que denuncian que el «desleal» Alberto Garzón está solo pendiente de sobrevivir políticamente y de llevar adelante algunas medidas de efecto relacionadas con las casas de apuestas y el consumo de determinados alimentos. En cuanto al presupuesto, Alberto Garzón no está siendo especialmente resolutivo dado que la última subvención que dio la concedió en agosto de este año.
