La Junta Electoral Electoral destrozó la hoja de ruta que tenía diseñada Pedro Sánchez, al que las encuestas no le dejan de dar alegrías. El presidente del Gobierno vio con enfado la exclusión de Vox del debate de Atresmedia y escogió TVE con la intención de reivindicar la televisión pública.
Pero la evidente connivencia entre Rosa María Mateo y La Moncloa ha carbonizado a la administradora única de RTVE y ha abierto un escenario insólito: esta noche TVE emitirá un debate a cuatro y 24 horas después Atresmedia, muy enfada con Sánchez, hará lo propio.
VOX Y EL PACMA NO ESTARÁN EN EL DEBATE
PACMA protestó tras no ser invitado al debate de Atresmedia: «Nos sorprendió mucho que se anunciara un debate con los cuatro principales partidos con representación parlamentaria y la inclusión de Vox», finalmente descartado por la Junta Electoral Central.
La formación animalista afirmaba que les llamaba la atención «que hayan incluido a Vox y no al PACMA, cuando ellos obtuvieron 47.000 votos en las últimas elecciones generales y el PACMA casi 300.000».
Pedro Fernández Barbadillo, columnista de Libertad Digital, afirma que la intención del PSOE de querer participar con Vox era seguir una estrategia «copiada de la que realizó el socialista François Mitterrand en los años 80, recién llegado a la presidencia de Francia».
El presidente francés, explica, intentó «mantenerse en el poder indefinidamente y la solución consistió en inflar un partido de extrema derecha que le quitase votos a la derecha. Por eso, el Elíseo ordenó a los medios de comunicación públicos que invitasen a sus debates a Jean-Marie Le Pen, un político tan fracasado que ni había podido presentarse a las elecciones presidenciales de 1981.
«El plan de Sánchez y sus asesores Iván Redondo y José Félix Tezanos es el siguiente. En primer término se quiere presentar al PSOE como el ‘voto útil’ de la izquierda entera, para salvarla del ogro Abascal, que viene a suprimir subvenciones a los chiringuitos y mantener las corridas de toros», señala.
LA CALMA VUELVE A RTVE TRAS EL ENFADO CONTRA SÁNCHEZ
Los Consejos de Informativos de RTVE habían protestado porque la Corporación Pública quedaba fuera del debate: «Es un desprecio hacia la radiotelevisión pública que el PSOE y su candidato y actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hayan rechazado participar en el debate electoral a cuatro propuesto por TVE».
«Asimismo, condenamos que el único debate en el que Sánchez ha aceptado participar sea el debate a cinco propuesto por un grupo privado de comunicación y que incluye al candidato de un partido sin representación parlamentaria», añaden.
Vox protestó por no ser invitado al de RTVE, pero la Junta Electoral Central defiende que «el debate de referencia se hace entre las cuatro formaciones políticas que obtuvieron mayor número de escaños en las últimas elecciones al Congreso de los Diputados», en las que Vox obtuvo un 0,2% del voto.
La JEC afirma que Vox «tampoco cumple la condición de grupo político significativo puesto que dicha condición no solo exige la obtención de un número de votos válidos igual o superior al 5% en recientes procesos electorales, sino que ese porcentaje debe haberse alcanzado en el ámbito territorial del medio de difusión». Los socialistas explicaron que «ni el PSOE ni Sánchez vetan a ningún candidato».
Es evidente que la cúpula de RTVE se ha convertido en un polvorín. Según Ok Diario, Elena Sánchez, mano derecha de Rosa María Mateo, presentó la dimisión tras una discusión contra la administradora única, que finalmente salvó los muebles.
«Las formas de ordeno y mando de Mateo, demostradas en sus comparecencias en el Congreso, han estado a punto de forzar una dimisión que hubiese hundido aún más la imagen de la cadena», añaden. La relación laboral entre Rosa María Mateo y Fran Llorente también sería, en la actualidad, inexistente.
EL CONSEJO DE INFORMATIVOS RECOGÍA FIRMAS CONTRA EL PSOE
El Consejo de Informativos de TVE, al que se le presumía una cercanía con el partido del Gobierno, ha recogido miles de firmas por la negativa inicial del PSOE a participar en un debate. Esta ausencia contribuye a cortar el nervio informativo que había impuesto Begoña Alegría.
«Ni entendemos ni aceptamos las razones por las que el PSOE y su candidato y actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, deciden no apostar por el servicio público y el pluralismo que representa RTVE para un momento y espacio tan significativos como es un debate electoral, y marginar así a la televisión pública en beneficio de la privada», asegura el CdI.
«Despreciar a RTVE supone, desde luego, dar la espalda a los miles de trabajadores de esta Corporación pública, y sobre todo a millones de ciudadanos que pagan este servicio con sus impuestos. Especialmente afectados son aquellos que viven fuera de España y que no podrán seguir el debate con facilidad, debido a las restricciones de derechos de emisión del medio privado», señalaban.
Finalmente, el Consejo de Informativos y profesionales emblemáticos como Xabier Fortés se han revuelto contra la propia Rosa María Mateo por intentar cambiar la fecha de los debates de espaldas a las otros tres contendientes y por intentar pisar el debate de Atresmedia.