viernes, 4 octubre 2024

Ifema rompe su relación laboral con Ombuds y evita la huelga de vigilantes

La empresa pública ha decidido rescindir su contrato con Ombuds después de que los vigilantes convocaran una huelga indefinida a partir del día 8 de agosto. La compañía de seguridad, propiedad de la familia Cortina, lleva tres nóminas atrasadas a sus 8.000 empleados. 

Según han avanzado fuentes de Ifema a Alternativa Sindical, el día 6 de agosto a las 12 de la noche los servicios de vigilancia del ente dependerán de Prosegur. Esta decisión asegura el futuro de los 120 empleados, que el próximo mes volverán a cobrar íntegramente su sueldo. Algo que no sucede desde mayo. 

Además de Ifema, Prosegur ha adquirido los servicios de seguridad de los centros Carrefour del norte y centro del país y el de Ferrocarriles de la Generalitat. Todas estas empresas eran anteriormente clientes de Ombuds, pero han roto su relación laboral por incumplimientos contractuales, como es el impago de nóminas o la falta de trabajadores. 

Con esta rescisión, Ifema elude la convocatoria de huelga indefinida que sus empleados habían anunciado para el día 8 de agosto. Todavía no hay comunicado oficial por parte del ente, pero fuentes internas aseguran a Alternativa Sindical que se hará público “en las próximas horas”. 

ENTIDADES QUE SIGUEN VINCULADAS A OMBUDS

De momento ni la EMT, ni Metro de Madrid se han pronunciado ante la decisión de Ifema. Alternativa Sindical seguirá manteniendo la huelga indefinida en ambos antes a la espera de que también rescindan su contrato. El sindicato ya ha presentado varias denuncias a clientes de Ombuds con el objetivo de conseguir la reubicación de los empleados. 

Estas dos empresas forman parte de la amplia lista de entidades que continúan su relación laboral con la compañía de los Cortina. Museo Thyssen, Agencia EFE, Eroski, Instituciones Penitenciarias o Renfe son algunas de ellas. El responsable de comunicación de Alternativa Sindical, Alberto García, les ha pedido “responsabilidad” y “soluciones inmediatas”. García insiste en que la única salida es “rescindir el contrato con este grupo y contratar otras de solvencia económica”. 

Por su parte Ombuds se resiste a perder a sus clientes. La empresa ha asegurado que está en busca de nuevos acreedores y que en un plazo de siete días resolverán definitivamente su futuro. El grupo de seguridad, oficialmente en concurso de acreedores, tiene una deuda de 40 millones con la Agencia Tributaria, además de las nóminas de junio, julio y extra de verano de sus 8.000 empleados.