UPN es una pequeña formación a la que no se le ha curado la cicatriz del cisma que sufrió en 1995. Es por ello que optan por lavar los trapos sucios de puertas para adentro y, en una estrategia copiada de la izquierda abertzale, evitar que los debates públicos que les lastren.
Pero los regionalistas navarros acaparan titulares en la prensa en los últimos días: el expresidente Miguel Sanz aseguró hace dos semanas que veía a UPN «un poco confundido» dentro de Navarra Suma; y la Mesa del Congreso ha abortado la apuesta de los navarros a pactar con Coalición Canaria, PRC y Teruel Existe para evitar ahogarse en el Grupo Mixto.
Tampoco ha agradado a nivel interno que Pablo Casado haya propuesto que UPN vote a favor de un Gobierno del PSOE y Unidas Podemos para desactivar la influencia independentista. Esta hipótesis fue descartada por el diputado estatal y aspirante a liderar a los regionalistas, Sergio Sayas: «El voto lo decidiremos nosotros. Nadie más», señaló.
Su rival y actual presidente de UPN, Javier Esparza, también fue noticia hace unos días por pasar por la ronda de consultas de Felipe VI. El líder regionalista copia la táctica de sus antecesores: a Madrid viajan para pactar con el PP y pisar Zarzuela en vez de dejarle ambas tareas a los diputados regionalistas en el Congreso.
XII CONGRESO DE UPN: SE AVECINA CIERZO
Javier Esparza quiere evitar que el XII Congreso de UPN, en el que aspira a mantenerse como líder regionalista navarro, se convierta en un circo mediático. Su opositor, Sergio Sayas, secretario de Organización en los tiempos de la presidencia de Yolanda Barcina, también es alérgico a airear en los medios las divergencias medulares.
Esparza ha dejado claro que no quiere pronunciarse sobre «cuestiones internas». El líder regionalista se sabe favorito para ganar las primarias tras recibir los apoyos públicos de Enrique Maya, alcalde de Pamplona, y Alejandro Toquero, primer edil de Tudela.
A Sergio Sayas, que ya ha dejado claro que no va en broma, tan solo le apoyan en público un pequeño grupo compuesto por la diputada foral Maribel García Malo, que curiosamente sustituyó a Esparza al frente del Servicio Navarro de Empleo, la concejal pamplonica María García Barbarena, o Fermín Alonso, mano derecha y sucesor de Sayas en Juventudes Navarras y también concejal de la capital navarra.
ALTAS POLÉMICAS
Diario de Navarra aseguró que el Consejo Político que convocaba al XII Congreso casi acaba como el Rosario de la Aurora porque Sergio Sayas acusó de «cacicada» a Javier Esparza tras advertir que 120 militantes se habían dado de alta en los últimos días.
El diputado, tal y como asegura el citado medio, amenazó a Esparza con el comité de garantías y los tribunales. Algún compañero le acusó de realizar prácticas similares en sus tiempos como secretario de Organización de UPN. Y otros, en voz baja, aseguran que Sayas tiene un legítima ambición con la que no esconde que no chocará en público contra Esparza porque no tienen diferencias de calado.
EL PALO DEL AÑO
Santiago Cervera, exconsejero de Salud de Navarra por UPN, ha arremetido en público contra Sergio Sayas, del que asegura que es «probablemente el político más desagradable que hay en Navarra y no es descartable que los suyos cometan el mismo error que otros partidos perpetraron antaño, preferir al que coleguea con la militancia en detrimento de quien podría liderar una parte mayor de la sociedad.
El Diario de Noticias de Navarra, volcado desde hace años contra los regionalistas, también asegura que «el mero hecho de que alguien como Sergio Sayas, un oportunista sin carisma ni proyecto que ha ido medrando en el partido sin otra ideología ni más aliados que quienes aspiran a seguir ligados a un cargo público, se crea con opciones de disputar a esparza el liderazgo del partido describe a la perfección la falta de rumbo en la que se encuentra la sigla de UPN».
FALTA DE DEBATES, ENFADOS Y RENUNCIAS
UPN ha anunciado que su secretario de Organización, Jorge Esparza, no continuará en el cargo para «dedicarse de forma íntegra a sus tareas como parlamentario foral» y aseguran que la decisión «había sido adoptada de manera compartida hace meses con la dirección del partido y se ha materializado ahora».
Javier Esparza, líder del partido, asegura que «la tarea de oposición que Navarra Suma debe llevar a cabo en el Parlamento para defender los intereses generales de la sociedad navarra necesita de personas como Jorge Esparza (que no tiene ningún parentesco con el líder del partido) que demuestran cada día su pasión y su compromiso con esta tierra».
En UPN el XII Congreso ha puesto las cosas a flor de piel: Javier Esparza evita hablar sobre las primarias en público, Sergio Sayas ha optado por un perfil bajo en los medios (mientras se disparan los rumores de que renunciará a optar al liderazgo si le conceden varios puestos dentro del Comité Ejecutivo del partido), y hay un enfado casi generalizado sobre el tratamiento mediático que reciben.
Tampoco pasa por sus mejores momentos Enrique Maya. El alcalde de Pamplona deberá prorrogar los presupuestos de EH Bildu, que datan de 2017, tras la negativa que ha recibido del PSN, de Geroa Bai y de los abertzales. Recuerden que Maya no pudo aprobar ni un solo presupuesto en la legislatura 2011-15.
