El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, está en racha. O al menos él está convencido de ello. Había dudas sobre si la autonomía más golpeada por el coronavirus estaba lista para pasar a la primera fase de la desescalada. La primera que no lo tenía claro y así lo había manifestado fue la propia presidenta, Isabel Díaz Ayuso. Pero las presiones de quien sí estuvo decidido desde el principio han dado sus frutos y han conseguido que la Comunidad de Madrid se presenta candidata para dar los primeros pasos de reapertura el próximo lunes.
Aguado ha sido una piedra en el zapato de Díaz Ayuso desde el momento en que llegaron al poder. En un principio, desde que estalló la pandemia, el vicepresidente estuvo más alejado de la toma de decisiones. Pero a medida que avanzaba y se paliaban las consecuencias de la crisis del coronavirus, sí que elevó el tono para pedir más manga ancha para los negocios de la Comunidad de Madrid. Y ahora ha conseguido convencer a Díaz Ayuso para acelerar los trámites de reapertura de la capital.
Esta decisión no ha sido rápida ni fácil. Las reuniones continuaron por la tarde de este miércoles en varios encuentros telemáticos, el último de los cuales se inició sobre las 18.45 horas. Pero quien se ha apuntado el tanto ha sido el vicepresidente, quien ha apostado por la reapertura de la Comunidad de Madrid desde finales del mes de abril.
Vamos a solicitar al Gobierno de España pasar a la fase 1 a partir del próximo lunes 11. Madrid está preparada para seguir avanzando en la desescalada, garantizando la salud de todos mientras reabrimos nuestra economía», ha comentado Aguado en su cuenta personal de Twitter tras conseguir resultados.
La presidenta dijo hace días que la Comunidad no estaba lista para pedir la reapertura, pero parece que las palabras de su socio de Gobierno de Ciudadanos ha sabido convencerla para que cambie su postura. Las 610 camas de unidades de cuidados intensivos que aún están ocupadas en la Comunidad desaconsejaban dar el paso, según aseguró este miércoles la presidenta autonómica Díaz Ayuso en una entrevista en Radio Nacional de España (RNE).
A medida que bajan los contagios, el miedo al coronavirus se convierte en miedo a la crisis económica y los políticos sienten la presión por evitar que el colapso sea mayor de lo que se espera. En un principio se esperaba que solo las regiones menos afectadas por el coronavirus levantaran el veto. Sin embargo, a pesar de que Madrid es el epicentro donde el coronavirus ha aterrizado con más fuerza
Hay miedo en la Comunidad de Madrid a la crisis económica y quieren empezar a trabajar cuanto antes. Esto es lo que ha motivado a Aguado y a Díaz Ayuso a dar el paso, a pesar de que Madrid es el epicentro donde el coronavirus ha arrasado con más fuerza.
Habrá medidas de contención y han avisado desde la administración pública que serán muy escrupulosos con el cumplimiento de las medidas. Pero ya se podrán reunir hasta 10 personas, se podrán visitar familiares y se podrá retomar la actividad económica con todo tipo de restricciones.
