La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, se han reunido este lunes de forma presencial en la sede del Ministerio, en Madrid, para «preparar el próximo curso en las mejores condiciones de seguridad».
Así lo ha desvelado la propia Celaá en un mensaje publicado en la red social Twitter. «Nuestro objetivo es que los alumnos puedan volver de manera presencial a las aulas», ha escrito la ministra de Educación. Su departamento no ha ofrecido detalles sobre los asuntos que se han tratado en la reunión.
Junto a Celaá han asistido el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, la secretaria general de Formación Profesional, Clara Sanz, y el subsecretario del Ministerio, Fernando Gurrea. Simón, por su parte, ha estado acompañado de otros cargos del Ministerio de Sanidad.
Preguntado por la prensa en una rueda de prensa en Moncloa, Simón ha explicado que la reunión se ha celebrado a petición del Ministerio de Celaá para «discutir sobre los criterios a aplicar para reducir los riesgos el curso que viene», y durante el encuentro, que ha durado una hora, se ha acordado un calendario de trabajo para tener listas las medidas sanitarias en centros educativos para septiembre.
En concreto, Simón ha señalado que esperan tener a finales de junio unas «guías» para que las comunidades autónomas «vayan adaptando sus mecanismos de entrada en septiembre» y donde se incluirán las recomendaciones sanitarias adaptadas al ámbito educativo.
BORRADOR CON ORIENTACIONES
El Ministerio de Educación y las comunidades autónomas ya trabajan en las medidas que habrá que implantar en los centros educativos el próximo curso contra el coronavirus. Entre ellas, la provisión de suficientes dispositivos electrónicos para garantizar «el acceso de todo el alumnado» a la educación ‘online’ en el caso de que se produzca un repunte de contagios que obligue a confinar de nuevo a la población en sus domicilios.
Así figura en el borrador del Ministerio de Educación y Formación Profesional, al que ha tenido acceso Europa Press, con las orientaciones para la preparación de planes de contingencia para el curso 2020-2021. El documento señala que los centros tendrán que proveer a sus estudiantes de estos dispositivos mediante «entrega o préstamo» para evitar la ‘brecha digital’ en los hogares sin conexión a internet y ordenadores.
«El desarrollo del curso 2020-2021 es imprevisible, dado el desconocimiento que aún tenemos acerca de la posible evolución de la pandemia del Covid-19. En consecuencia, resulta imprescindible establecer planes de contingencia que prevean las distintas circunstancias que puedan darse», se lee en este borrador con el que trabajan conjuntamente el Ministerio y las comunidades tras acordar, el pasado 14 de mayo acordaron, la creación de un grupo mixto para preparar conjuntamente el regreso a las aulas en septiembre.
Todos los centros educativos contarán con planes de contingencia ante una eventual suspensión de la actividad docente presencial, y esos planes deben estar definidos antes de las próximas vacaciones escolares. «Por lo tanto, esa será una tarea prioritaria para desarrollar en este próximo periodo de actividad escolar previo a la finalización del curso», indica el documento.
Para elaborar esos planes de contingencia, el Ministerio enumera una serie de recomendaciones a la hora de adaptar la vida en los centros a las medidas necesarias para prevenir contagios. Entre ellas, la provisión de material higiénico y sanitario, mantener las distancias de seguridad con limitación de aforos en aulas y otros espacios como patios y zonas comunes.
El Ministerio recomienda también crear protocolos de movilidad para el acceso y la salida de los centros, y adecuar los horarios «para cumplir las condiciones sanitarias establecidas» con el «establecimiento de turnos» entre los estudiantes.