Los medios de comunicación son la herramienta fundamental para el desarrollo de cualquier país. Estamos hablando de un «Derecho Humano y Universal» que tienen las personas de acceder a todo tipo de fuentes informativas que influya de manera positiva en su formación integral. Hoy más que nunca, existe un hilo casi que invisible entre periodistas y políticos. Para nadie es un secreto que estos nunca han tenido buena relación. De hecho, los mismos Gobiernos, ven en los profesionales de la palabra una amenaza directa a sus aspiraciones de llegar a las masas como “líderes de una sociedad”.
Lo cierto es que el tiempo ha demostrado que el periodismo es y seguirá siendo el principal motor que forja cambios trascendentales en las Naciones. Pues a partir de los mass media, las comunidades pueden estar al tanto de los últimos aconteceres, y no sólo eso, los periodistas se convierten en la voz de millones de personas que muchas veces no han sido escuchadas.
Desde luego que esta discrepancia entre políticos y periodistas se ve en el campo de batalla, es decir, en la calle, en las notas de prensa, en las famosas entrevistas. Hemos visto cómo una pregunta bien formulada saca de sus casillas a cualquier simpatizante de la política internacional. Esto corresponde principalmente al poder que tienen los periodistas de revelar todo aquello que permanecía oculto.
De ahí la necesidad de mostrar esos puntos donde los políticos han quedado de brazos cruzados, con la boca abierta, y sin saber qué responder. Claro, lo hacen desde la euforia, porque le han preguntado eso que tanto miedo les genera. Te presentamos esos momentos que han quedado para el recuerdo, porque son ejemplos de la lucha entre la política y la comunicación de nuestra historia.
1Juntos pero no revueltos
Contrario a lo que muchas personas piensan, los políticos y periodistas siempre han tenido inconvenientes en sus actuaciones. Sobre todo por un asunto de primicias, y que el periodista tiene ese olfato noticioso para sacar a la luz pública esos detalles que permanecían ocultos. Porque eso es el periodismo, una forma de vida que se encarga de esparcir a través de la esfera global el conocimiento. De nada sirve una sociedad desarrollada, cuando en realidad la información queda en una cápsula sin salida a los habitantes.
Por supuesto que los casos que mayormente se conocen están relacionados a sobornos, tráficos de drogas, financiamiento al terrorismo, violación a los derechos humanos, y muchas otras vertientes. Es decir, los periodistas tienen en sus manos el poder de hacer y deshacer carreras, y los políticos ven como un agente inusual que puede perturbar el libre ejercicio de sus responsabilidades.
Allí es donde vienen las disputas, y ese celo a la hora de hablar a la prensa. Hay políticos que no dan declaraciones, y se limitan a dar testimonios sobre las interrogantes. Uno de ellos es el actual Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien en diversas oportunidades ha tenido altercados con los medios de comunicación.
