La Guardia Civil ha llevado a cabo durante el primer semestre del presente año un total de 24.180 actuaciones relacionadas con protección animal, según ha informado la Dirección General de la Guardia Civil.
De ellas, 23.617 han sido por infracciones administrativas (como pueden ser casos en los que los animales no cuentan con unas condiciones higiénico-sanitarias adecuadas o no están identificados como marca la normativa, entre otros) y 563 por delitos, de los que 365 de estos delitos son por abandono y maltrato animal con 333 personas detenidas o investigadas por estos hechos.
La Guardia Civil ha destacado que en los últimos años se ha constatado una «extraordinaria» evolución en la protección y defensa de los animales y las condiciones necesarias para su bienestar, lo cual ha venido acompañado de un amplio desarrollo normativo, necesario en la lucha contra verdaderas mafias y organizaciones criminales detrás de esas conductas.
Fruto de ello, el SEPRONA descubrió recientemente un zoo ilegal donde se encontraban aproximadamente 150 animales en condiciones lamentables que hacían temer por sus vidas.
La Guardia Civil también en los últimos años ha incorporada nuevas técnicas para la detección del maltrato animal, ayudados por el Servicio de Criminalística. Este año se han analizado restos óseos de galgos y también de linces, para descubrir a los responsables de los delitos.
Sobre el tráfico de especies, la Guardia Civil ha señalado que se ha convertido en una de las actividades más lucrativas, moviendo cada año miles de millones de euros. En términos de delincuencia organizada constituye, junto al tráfico de seres humanos, el narcotráfico y la falsificación, una de las «amenazas más importantes a nivel global».
El tráfico de este tipo de especies suelen ser mamíferos, aves, reptiles, peces, plantas, entre otros ya que este tipo de negocios crea cuantiosos beneficios económicos.
Al igual que contra el tráfico de especies y el maltrato animal, la Guardia Civil lucha contra la captura de la fauna silvestre no autorizada. En la mayor parte de los casos, el furtivismo es llevado a cabo por personas que cazan en terrenos cinegéticos no autorizadas por los titulares de los mismos.
Las investigaciones desarrolladas a escala nacional durante los últimos años ponen de manifiesto la existencia de organizaciones «muy especializadas» en la práctica del furtivismo de caza mayor.
Coincidiendo con el comienzo de la temporada de caza en muchas comunidades autónomas, la Guardia Civil refuerza los dispositivos de vigilancia y control de la caza en aras de preservar la biodiversidad y de la protección animal.
La actividad diaria que realiza la Guardia Civil está encaminada en la inspección de tiendas de animales, visita a granjas y otros grandes centros de cría, supervisión del transporte de todo tipo de animales y detención de quienes maltratan animales.
Asimismo, también se lleva a cabo otras acciones como es el rescate de ejemplares en situación crítica o el traslado y/o custodia de animales intervenidos en operaciones con el fin de proporcionarles un mejor destino.
La Guardia Civil ha puesto en valor la importancia de los animales en la vida del hombre y no solo desde un punto de vista social, a través de los animales de compañía, sino del «papel fundamental que juegan en el equilibro de los ecosistemas en el planeta».
«Es por tanto una labor fundamental de todos el respetarlos, preservar los hábitats en los que viven en libertad y cuidar de aquellos que tenemos a nuestro cargo», ha apuntado la Guardia Civil.