Una operación de la Policía Nacional ha permitido detener a doce presuntos pedófilos en varias ciudades españolas por su relación con una página web que operaba desde Portugal y que se dedicaba a la venta de material de abuso sexual infantil.
La Policía ha destacado la juventud de los detenidos, de los cuales cuatro eran menores de edad y siete estaban en la veintena. Uno de ellos, arrestado en Barcelona, había compartido 49 vídeos y nueve fotografías de niñas muy pequeñas en muy corto espacio de tiempo.
Según ha informado la Policía Nacional, el administrador de la web y sus servidores se encontraban en Portugal, por lo que fue detenido por la policía lusa. La posterior investigación permitió la detención de otras doce personas, presuntos pedófilos, en Barcelona, Gerona, Sabadell, Cáceres, Albacete, Cádiz, Castellón, Madrid, Málaga, Murcia y Valencia.
La red desarticulada intercambiaban el material sexual a través de mensajería instantánea. La investigación ha contado con el apoyo y colaboración de EUROPOL, INTERPOL y la Policía de Seguridad Pública de Portugal, y fue fundamental la colaboración ciudadana recibida a través del portal www.policia.es/colabora.php, que puso a los agentes tras la pista de un sitio web de distribución comercial de material pedófilo.
El administrador del sitio web es un ciudadano residente en Portugal que obtenía regularmente cuantiosos beneficios económicos derivados de estas actividades ilícitas. Con la finalidad de rentabilizar el negocio, y obtener importantes ganancias, ofrecían dos cauces diferentes: uno de ellos es efectuar un pago directo a través de monedas virtuales o de plataformas de gestión económica online, lo que permite al visitante evitar la publicidad.
El segundo es interponer entre la página y las imágenes de abusos sexuales a menores un intermediario publicitario. De esa forma, cada vez que alguien accede a ese enlace, el creador de la web ilegal recibe una pequeña contraprestación.
Algunos de los pedófilos arrestados exhibían «actitudes jocosas ante los abusos sobre niños y tenían un consumo compulsivo del material ilegal», según ha detallado la Policía Nacional. Entre ellos destaca la detención de un individuo en Málaga que era uno de los miembros más activos en estos canales investigados y con mayor volumen de material ilegal compartido, un total de hasta 38 vídeos de niños de muy corta edad sometidos a graves abusos sexuales.
La Policía también destaca la juventud de los detenidos, de los cuales cuatro eran menores de edad y siete estaban en la veintena y el teléfono móvil era el medio principal de comisión del delito. Los menores a menudo disponen de esta herramienta de conexión a Internet sin supervisión, y de hecho, es el instrumento preferente para ello.
Por ello, desde la Policía Nacional se aconseja que los menores siempre tengan supervisión paterna sobre su actividad online, así como que se valore la necesidad de que dispongan de estos terminales fuera de su domicilio.
Los agentes han acreditado que los investigados ponían en común de consejos para eludir su responsabilidad penal, evitando ser detectados e intercambiando información sobre canales que garanticen al máximo su privacidad y seguridad. Además, y como es habitual, utilizaban tanto nomenclatura como contenido, códigos y jerga para evitar llamar la atención sobre el material que realmente albergaba.
Durante la investigación, los agentes lograron identificar además a dos ciudadanos colombianos, cuya información se remitió a través de INTERPOL a dicho país para que actuasen de acuerdo a su legislación.