El tabaco disminuye más de una década la esperanza de vida de un fumador, según un experto de QuirónSalud

El doctor Dick Pasker, jefe de neumología del Hospital Quirónsalud Torrevieja y Alicante ha asegurado que fumar disminuye en 12 años la esperanza de vida de un hombre fumador y 11 años en el caso de la mujer con motivo del Día Mundial sin Tabaco.

En la misma línea, ha señalado que se han identificado al menos 98 sustancias en el humo del tabaco con capacidad para ser tóxicas. Entre las más dañinas se encuentran los oxidantes, la acroleína, el formaldehído, el óxido de nitrógeno, el cadmio y el cianuro, según ha indicado en un comunicado de la firma sanitaria.

«Aproximadamente la mitad de todas las personas que continúan fumando morirán debido al hábito», afirma el doctor Pasker. Además, añade «que fumar no sólo causa cáncer de pulmón, de laringe, de riñón, de vejiga, entre otros, sino que puede ocasionar daño a casi todos los órganos en el cuerpo, incluyendo los pulmones, el corazón, los vasos sanguíneos, los órganos genitales, la boca, la piel, los ojos y los huesos».

Por ello, explica que fumar «reduce la capacidad pulmonar lo que supone un mayor riesgo de sufrir afecciones pulmonares graves y aumenta la gravedad de las enfermedades respiratorias como es el caso de la Covid-19, una enfermedad infecciosa que ataca principalmente a los pulmones».

«El tabaquismo deteriora la función pulmonar, lo que dificulta que el cuerpo luche contra los coronavirus y otras afecciones respiratorias y como indican los datos de investigación disponibles hasta la fecha, los fumadores tienen un mayor riesgo de desarrollar síntomas graves y de fallecer a causa de la Covid-19″, detalla el neumólogo de Quirónsalud de Torrevieja y Alicante.

Asimismo, el experto subraya algunas de las medidas que se pueden llevar a cabo para dejar de fumar, tales como pensar en todas las ventajas que tiene el no ser fumador como mejorar el aspecto físico, ahorrar dinero, respirar mejor u oler mejor.

En definitiva, el especialista también recuerda la existencia de determinados fármacos y sustitutivos de la nicotina que pueden ayudar durante el proceso de deshabituación, además de la supervisión de un especialista en caso necesario.