Uno de los problemas que más sufren los españoles actualmente es el estrés. La sociedad se ha acostumbrado a convivir en este estado antinatural llegando incluso a cronificarse. Puede afectar nocivamente tanto a la mente como al cuerpo, por lo que es necesario evitar que se establezca en el organismo perjudicando tu salud. Ten en cuenta los siguientes consejos para reducirlo alcanzando la calma.
Respira con el diafragma
El cuerpo se relaja cuando la respiración se hace concentrando el aire en el estomago en vez de en el pecho. Cuando los pulmones se llenan de aire tras la inspiración, el diafragma se encarga de hacer presión hacia abajo ocasionando que el estómago suba. Para llevar a cabo este tipo de respiración relajante es recomendable que te sientes en una silla en posición erguida formando un ángulo recto. Coloca una mano sobre la parte superior del pecho y la otra a la altura del abdomen. Comienza a inhalar por la nariz lentamente de forma profunda el aire. Debes notar que la mano situada sobre el pecho permanece inmóvil, mientras que la del abdomen se mueve hacia delante al llenarse de aire la zona de la tripa. Mantén unos segundos la respiración y espira profundamente vaciándote de aire. Si realizas este ejercicio durante unos minutos tus pulsaciones bajarán y tu estrés se reducirá.
