Ayuso posa con Uber para fomentar el taxi en Madrid

El taxi no es lo mismo que Uber. La presidenta de la Comunidad de la Madrid, Isabel Díaz Ayuso, apuesta «por la modernización y mejora del Taxi de Madrid», pero posa con un coche de Uber. Y es que aunque parezcan similares por los servicios que ofrecen, lo cierto es que no son lo mismo. Una equivocación de la líder de la región madrileña que ha quedado plasmada en las redes sociales y no ha pasado desapercibida para los usuarios, que no han dudado en mencionárselo. Se trata de un colectivo muy similar, pero donde existen diferencias, y a los que no habrá sentido muy bien que se les confunda dada la «guerra» que ha habido entre ambos.

Ayuso ha compartido la imagen su cuenta de Twitter, en la que aparece en un acto público junto a un coche que lleva las letras «Uber Green». Además, ha acompañado la fotografía con un texto que recoge: «La tecnología ha cambiado la movilidad. Los ciudadanos son los que eligen qué modalidad de transporte quieren. Como administración debemos asegurarlo y que se haga con las mayores garantías de calidad y competencia. Apostamos por la modernización y mejora del Taxi de Madrid». Unas palabras desafortunadas que revelan una confusión entre los tipos de vehículos de taxi y Uber.

La firma Uber hace referencia a los Vehículos de Transporte con Conductor (VTC), este tipo de servicios se contratan de forma digital, cuentan con un servicio prepago y el importe se calcula antes de efectuarse. En el caso de los taxis, se puede solicitar su servicio tanto de forma online o en la calle y el pago se realiza una vez hayas llegado al lugar de destino. Además, los taxis cuentan con una herramienta, llamada taxímetro, que va calculando la tarifa que debe abonar el cliente en el momento. Además, una de las polémica que ha enfrentado a ambos tipos de conductores son las tarifas. Mientras que las de los taxis son fijas y no pueden variar, los precios de los Uber son mucho más volátiles y, en momento de escasez, pueden incrementarse, adaptándose a la demanda existente en ese momento.

El acto al que asistía la presidenta de Madrid lo que pretendía era avanzar que su Gobierno está trabajando en el diseño de una aplicación para planificar los viajes en transporte. El traslado incluirá Metro, autobuses, bicicleta, patinetes, taxi y VTC. Esta herramienta tiene como objetivo que los madrileños puedan organizar sus viajes. «Estamos trabajando conjuntamente para integrar el transporte público en aplicaciones de empresas privadas, como está haciendo Uber y esperamos que en 2022 los madrileños ya pueden programar sus viajes combinando el transporte público con los servicios de esta empresa», ha sido lo que ha explicado la presidenta de la región. Todo ello en un evento para la presentación de Uber Green, que es una apuesta de dicha compañía por la flota de vehículos eléctricos.

Por otra parte, la líder popular de la capital también ha destacado que creen «decididamente» en la colaboración entre lo público y lo privado. Por este motivo, afirman que están poniendo a disposición de todos, especialmente de los ciudadanos, todas las herramientas para facilitarles la vida. Una cuestión que pretenden llevar a cabo «sin enfrentar la economía, el desarrollo y el empleo con el medio ambiente, como muchas veces se intenta hacer desde posiciones políticas trasnochadas». Desde la Comunidad de Madrid destacan que la presidenta pretende garantizar la continuidad de las VTC en la Comunidad de Madrid y apoyará al sector del taxi para mejorar en digitalización y flota.

Este anuncio llega en plena tregua entre la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y líder del Partido Popular, Pablo Casado. Y es que el presidente del Partido Popular parecer haber llegado a la conclusión de que no puede aspirar a la Moncloa con opciones al mismo tiempo que mantiene un pulso con el ala «aguirrista» del PP. Pablo Casado ya no quiere «disputar» a Isabel Díaz Ayuso la presidencia de la formación en Madrid. La idea que sopesan en Génova es permitir a la presidenta alcanzar sus objetivos este 2022 a cambio de que la presidenta de la Comunidad de Madrid arrope a Casado en su carrera a la Moncloa. Si las encuestas reflejan tras esta tregua que las cifras del PP mejoran, no habrá represalias. Además, desde Sol celebran que Génova haya tomado conciencia y haya llegado a la conclusión de que un enfrentamiento interno no lleva a nada.