Ahorrar no es tarea sencilla y mucho menos en los tiempos actuales. Sin embargo, hay algunos métodos que nos pueden ayudar a ir apartando pequeñas cantidades de dinero casi sin darnos cuenta. Lo importante es ser constante y ahorrar un poco diariamente, y al cabo de unos meses nos daremos cuenta de que hemos reunido una cantidad considerable. Lo primero para poder ahorrar es reducir los gastos hormiga, es decir, esos pequeños gastos regulares y cotidianos que se puede eludir sin que ello suponga un trastorno en nuestra calidad de vida. Por ejemplo, compras impulsivas e innecesarias, tarifas de suministros inadecuadas, suscripciones a servicios que realmente no utilizamos, caprichos totalmente prescindibles… Estos gastos hormiga se convertirán en parte de nuestros ahorros.
AHORRAR CON EL MÉTODO KAKEBO
Más que un método de ahorro, es una forma de controlar nuestras finanzas, y si lo llevamos al día puede ser de gran ayuda para identificar los mencionados gastos hormiga y hacernos una idea aproximada de cuánto vamos a poder ahorrar y cuál es el método que mejor se adecua a nuestro bolsillo y estilo de vida. Kakebo significa “libro de cuentas para la economía doméstica” y sigue una regla muy simple que consiste en anotar todos los gastos que se hacen a diario. Después, se organizan esos gastos por categorías: alimentación, vivienda, suministros, coches, ocio… Esto lo podemos hacer en un cuaderno o utilizar alguna aplicación en el smartphone.
