Teodoro García Egea hace tiempo que más de un año que salió de las filas del Partido Popular, pero ha mantenido el acta en el Congreso de los Diputado hasta este jueves 16 de marzo. Todo un año en el que ha continuado ejerciendo su cargo en la política como diputado en de Cámara Baja y que ha aprovechado para decir todo lo que llevaba tiempo guardado a los miembros del PP. Y es que, fuentes del Congreso destalla, que este político se puso en «modo destroyer» tras abandonar la formación y no se corta en decir cualquier cosa o comentario a sus excompañeros a la cara. Y parece ser que son muchos los que han sufrido esta situación, dado que Teodoro García Egea cuenta ya con pocos amigos dentro del grupo popular, debido a que con tras la llegada de Alberto Núñez Feijoo, fueron muchos los «casadistas» y «teístas» que abandonaron las siglas. De esta forma, el político murciano se volvió todo un «gamberro» y decidió aprovechar ese último año en el Congreso para decir todo lo que pensaba.
El que fuera número dos del Partido Popular junto a Pablo Casado tenía claro que a partir de su salida de la formación era el momento perfecto para saldar cuentas. De esta forma, activó rápidamente el «modo destroyer» y comenzó a lanzar comentarios y pullas a diestro y siniestro contra sus excompañeros. No hay nada que este político se calle, destacan fuentes de su entorno cercano, y, además, se lo dice a la cara a todos ellos. Puede que Teodoro García Egea haya optado por esta estrategia porque sabía que ya nada le ligaba al Partido Popular, sabía que no existía ningún tipo de posibilidad de que le hicieran un hueco en el equipo de Alberto Núñez Feijoo. Y, ante este escenario, decidió volverse un «gamberro» y hacer lo que quería.
teodoro garcía egea ha aprovechado su último año en el congreso para decir todo lo que pensaba
A ello se suma que en la formación le quedan muy pocos amigos, dado que los que se posicionaron de su lado durante la crisis interna en el PP, han acabado por salir de la política. Y, actualmente solo mantiene relación con unos pocos, con los supervivientes, los que han conseguido mantener su cargo a pesar de que su lealtad no era ni hacia Isabel Díaz Ayuso ni hacia Alberto Núñez Feijoo y que además, son conocidos «casadistas» o «teístas». Ahora, tras un año de pullas contra los populares y tras un año trabajado en el mundo de las cripto y del blockchain, ha decidido dar un paso más y ha abandonado su cargo como diputado.
El exsecretario general del PP ha anunciado este jueves 16 de marzo su retirada de la política y la renuncia a su escaño en el Congreso de los Diputados. La decisión de dejar su acta en la Cámara baja se produje cuando se cumple poco más de un año de su salida de la Secretaría General del PP tras la profunda crisis interna dentro del partido que acabó con el liderazgo de Pablo Casado. El exnúmero dos del PP y diputado por Murcia ha decidido volcarse en la tecnología blockhain y los bitcoins. Desde hace tiempo lleva sopesando esta cuestión, el problema es que los proyecto entorno a este área no acababan por despegar y por ello mantenía su acta en el Congreso. Ahora, tras el lanzamiento de su libro parece que finalmente considera que ha llegado el momento de centrarse en este mundo. El problema es que ha decidido publicar su libro sobre el mundo cripto en un momento en que estas se están hundiendo.
TEODORO GARCÍA EGEA PUBLICA UN LIBRO SOBRE CRIPTOECONOMÍA
Cuando salió del Partido Popular, Teodo García Egea tenía claro que debía comenzar a pensar en su futuro y en lo que haría a partir de entonces. En ese momento, el mundo del Blockchain estaba creciendo como la espuma y el exsecretario general del grupo popular decidió lanzarse y comenzar a trabajar en un proyecto entorno a las criptomonedas. Se ha sumergido totalmente en este tema y todo lo que comparte a sus redes sociales giran entorno al ello. Tal es su implicación que hasta decidió lanzarse a escribir un libro al respecto. El problema es que este documento ha tardado demasiado en verdad la luz y ahora que ha sido publicado las plataformas de criptomonedas están hundidas. Es decir, que Teodoro García Egea, que creía que había encontrado toda una oportunidad de negocio, ha llegado demasiado tarde por su indecisión respecto al proyecto y a meterse de lleno en él.
