La ‘secta’ que quiere quitarle la Comunidad de Madrid a Ayuso: «utilizan tu compromiso para ir en sus listas»

Dentro de todo el abanico de partidos que se presentan a las elecciones existen formaciones que van más allá de lo político. Este es el caso del Partido Humanista, una posibilidad electoral que sirve de pantalla para lo que se conoce como El Mensaje de Silo, la Comunidad o el Movimiento Humanista. Su presencia individual en las elecciones autonómicas y generales destaca desde que Izquierda Unida les invito a marcharse de la formación en 1986 cuando se dio a conocer su relación con el «movimiento sectario». Desde entonces, ostentan a los cargos políticos como formación única con la intención de ser «el cambio de esta civilización hacia una nación humana universal».

Sin embargo, el Partido Humanista está completamente ligado al Movimiento Siolista, el cual tiene diferentes nombres pero todos unidos por ser un colectivo que está acusado de ser una ‘organización sectaria’, tanto por la Asamblea Nacional de Francia desde 1999 como por los expertos en estudios sectarios. Su doctrina se centra en la palabra de su mesías Mario Luis Rodríguez Cobos, conocido como Silo, a quien definen como guía espiritual y que se centró en la curación del sufrimiento alegando que «únicamente puedes acabar con la violencia en ti y en los demás y en el mundo que te rodea, por la fe interna y la meditación interna».

Su representación política se centra, principalmente, en barrios y municipios donde tienen sus congregaciones y piden el voto al electorado con un discurso de tono espiritual alegando «a ir más allá de un voto y a formar parte de un proyecto que es más que un partido». Además, hablan de la política desde los barrios y, aunque sean una agrupación política, su ideología se centra en «la necesidad de libertad que experimentamos los seres humanos» y basan su programa en «la transformación y superación social de la violencia».

La no-violencia de «un movimiento coercitivo»

Diana es psicóloga y se acercó al Movimiento Humanista en su época universitaria porque aparecían en Change.org como un colectivo antiviolencia. Ella, en pleno proceso de aprendizaje académico, quiso colaborar con un proyecto que se acercaba a sus intereses como futura psicóloga. Sin embargo, ella misma cuenta que lo que se encontró fue muy diferente. Diana asegura a Moncloa.com que el Movimiento Humanista es un «movimiento coercitivo que tiene a gente trabajando gratis para ellos». Asegura que estuvo un tiempo participando para ellos pero que, con el tiempo, vio «de que se trataba realmente» y lo terminó dejando.

Durante su época como voluntaria del movimiento, Diana cuenta que su trabajo «no tenía nada que ver con la antiviolencia, sino que te mandaban por las tiendas de la zona buscando apoyo comercial para sus medios». Así, después de una época «perdiendo el tiempo en ir de un lado para otro buscándoles promoción», a Diana le empezó a llegar información de la relación del movimiento con la política, y entendió que «usan a los miembros de la asociación para implicaros en su partido político».

En este sentido, el Partido Humanista, al igual que los demás partidos políticos, utiliza la técnica de los paracaidistas para llenar las listas de los municipios donde no tienen los suficientes apoyos. Sin embargo, destaca que las listas de este partido estaban formadas «por personas del movimiento social, no del político» ya que «utilizaban tu compromiso para que te presentaras en sus listas». Diana asegura que «nadie te obligaba a nada, pero tú no te sentías libre para tomas la decisión». Ella, a pesar de «no comulgar con su movimiento político» terminó formando parte de una de sus listas municipales.

La Comunidad de Madrid, su fuente principal de votos

El Partido Humanista sigue presentándose a las elecciones desde 1986 en diferentes municipios y comunidades. Para los comicios municipales y autonómicos de este año ha reducido sus listas y solo presentará nueve candidaturas. En este sentido, se presentan como alternativa a Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona y también en los de Bilbao, Basauri y Durango, en el País Vasco. El resto de sus candidatos se presentan en diferentes municipios madrileños, como son Alcalá de Henares, Alcobendas, San Sebastián de Los Reyes y el Ayuntamiento de la capital, así como competidores de Isabel Diaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.

El Partido Humanista ha centrado sus esfuerzos electorales en la capital. Esto se debe a que en las pasadas elecciones de 2019 es el lugar donde más votos obtuvieron, llegando a superar a fuerzas más conocidas como Los Verdes y consiguiendo casi 3.000 apoyos. Por esto, este partido político de origen espiritual ha elegido Madrid como la comunidad para profundizar con su programa, presentándose como la alternativa a una clase política que, según ellos, se basan en la lucha de «eslóganes y formas vacías».