El Monumento 9 de Chalcatzingo, conocido como el ‘Portal al Inframundo’, tiene una larga historia detrás. Este monolito olmeca, fue descubierto a principios de la década de 1960 y fue objeto de tráfico de arte. Actualmente conforma una pieza fundamental para el patrimonio cultural de México, pero este tesoro arqueológico fue robado y llevado a Estados Unidos.
El monolito fue adquirido ilegalmente por los traficantes. Con el objetivo de facilitar su contrabando hacia Estados Unidos, los delincuentes utilizaron mazos para golpear la escultura, reduciendo su peso y tamaño. Un acto de vandalismo que dejó al monumento prácticamente reducido a escombros. Tras una larga investigación de Mario Córdova Tello, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y gracias a un estudio anterior de David Grove, quien había estudiado el sitio durante décadas, consiguieron dar con él. Finalmente, el 19 de mayo de 2023, las autoridades mexicanas se reunieron en el Aeropuerto Internacional de Denver, Colorado, para la entrega oficial del Monumento 9.
