El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha destacado la presencia significativa de cultura material colonial en los museos estatales españoles. Es decir, sigue adelante con su polémica sobre la «descolonización» en los muesos estatales del país. En respuesta a preguntas planteadas por los diputados populares Pablo Hispán y Soledad Cruz-Guzmán, Urtasun ha identificado obras que según su criterio considera representativas del arte colonial en España.
Entre los ejemplos citados por Urtasun se encuentran el Museo Arqueológico Nacional, que alberga restos arqueológicos ibéricos, y los museos con colecciones de arte virreinal, como la sección de pintura del Museo de América de Madrid.
La afirmación del ministro surge en el contexto de un debate sobre la presencia y representación de la cultura colonial en los museos españoles, incluyendo instituciones emblemáticas como el Museo del Prado y del Mueso Reina Sofía.
URTASUN NO MENCIONA QUE PLANES DE DESCOLONIZACIÓN TIENE PARA EL PRADO NI PARA EL REINA SOFÍA
Sin embargo, Ernest Urtasun, en su respuesta oficial a los diputados del Partido Popular, el Ministerio no ha mencionado que planes específicos de descolonización tiene pensados para las instituciones emblemáticas como el Museo del Prado o el Reina Sofía.
La respuesta oficial del Ministerio destaca que, según la catalogación, en el Museo Naval «no existe ningún tipo de catalogación que coincida con cultura colonial». Además, aclara que la Real Academia Española (RAE), a consulta del Ministerio de Ciencia, no tiene entre sus objetivos promover la cultura colonial, aunque sí incorpora las contribuciones de todas las Academias de los Estados americanos en sus obras
Urtasun ha resaltado la influencia del arte íbero por los pueblos colonizadores del Mediterráneo Occidental y la significativa presencia de pintura virreinal en museos e iglesias españolas y americanas, con especial mención a la colección del Museo de América de Madrid.
Restos arqueológicos ibéricos y el arte virreinal, entre los ejemplos de Urtasun de «arte colonial»
Asimismo, se ha abordado el legado colonial en Filipinas, donde la presencia española dejó una marcada influencia cultural que se extendió hasta finales del siglo XIX, y en África, reconociendo la producción cultural durante los procesos colonizadores del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.
La ausencia de menciones específicas a planes de descolonización para el Prado y el Reina Sofía suscita interrogantes sobre la estrategia del Ministerio de Cultura para abordar la presencia y la interpretación del legado colonial en estas instituciones de renombre.
URTASUN GENERA DESCONFIANZA EN EL PP
La declaración de intenciones del Ministerio en relación con la descolonización en el ámbito cultural ha generado una profunda inquietud en el Partido Popular. Sol Cruz-Guzmán, portavoz de Cultura del PP en el Congreso de los Diputados, expresó su preocupación: «La cultura debe ser una herramienta de cohesión social y territorial, y este ministro la está utilizando para todo lo contrario. Nos preocupa en qué manos van a quedar los museos y qué van a hacer con ellos».
La diputada añadió que la respuesta de Urtasun genera intranquilidad y critica la idea de hablar de la cultura como arte colonial: «Quieren dividir el país en diferentes cachitos, desmantelar los grandes contenedores culturales, que son los que nos hacen ser focos atractivos de turismo cultural. Los directores de los museos son quienes deberían definir estos discursos museísticos».
Desde que Urtasun abrió el debate sobre la descolonización en el Congreso, han surgido numerosas voces que han expresado su opinión al respecto. Miguel Falomir, director del Museo del Prado, fue preguntado sobre el tema esta semana y dijo lo siguiente al medio ABC: «¿Descolonizar? No sé a qué se refería el ministro», declaró.
Por su parte, Manuel Segade, director del Museo Reina Sofía, también abordó el tema, afirmando al citado medio que la descolonización es un asunto «ineludible» en el arte contemporáneo y revelando que ha hablado sobre ello con Urtasun. Por su parte, Jordi Martí, secretario de Estado, celebró que se aborde el debate de manera nacimiento. «Es obvio que muchas veces los discursos museográficos, aquí y en todas partes, han imprimido una mirada colonial», señaló, haciendo referencia a la polémica generada en Madrid sobre este tema.
LOS PLANES INTERNACIONALES DE URTASUN
En otro orden de cosas, Ernest Urtasun ha manifestado su compromiso con los planes internacionales en relación con las obras de arte del periodo colonial que se encuentran fuera de su país de origen. En respuesta a los interrogantes planteados por los diputados del Partido Popular, Urtasun destacó la importancia de seguir de cerca el debate internacional sobre estas piezas y se comprometió a hacer todo lo posible para cumplir con los compromisos internacionales asumidos por España.
El ministro definió la cultura colonial como «un conjunto de manifestaciones culturales que se desarrollan en una comunidad bajo la influencia dominante de otro grupo humano foráneo, que introduce sus formas culturales y modifica las manifestaciones propias de las comunidades originarias». Esta definición refleja el enfoque del Ministerio de Cultura en la comprensión y contextualización de las obras de arte coloniales en el panorama cultural español.
Con esta postura, Urtasun busca no solo cumplir con los compromisos internacionales de España, sino también hacer efectiva su «guerra cultural» que anunció durante sus primeros días como ministro.
