Izquierda Unida (IU) está terminando de formalizar la venta de su sede federal situada en el número 35 de la calle Olimpo de Madrid, que será comprada por la Embajada de Ghana por un cantidad aproximada de tres millones de euros, según fuentes de la dirección federal.
El edificio, de cuatro plantas además de un sótano, está ubicado en una superficie del distrito de Hortaleza cedida por el Ayuntamiento de Madrid al PCE en 1990, por el que además se abona un canon a la administración municipal.
Aunque fue IU quien lo construyó a finales de los 90, la formación liderada por Alberto Garzón ha necesitado solicitar permiso al consistorio para poder proceder a su venta.
Garzón lleva intentado vender la sede desde que llegó a la dirección de IU en 2016, al considerar que el inmueble, de grandes dimensiones, suponía un elevado gasto innecesario, sobre todo teniendo en cuenta la elevada deuda que arrastra el partido desde la época de Julio Anguita, y que ahora se sitúa en torno a los 7,5 millones de euros, según las fuentes consultadas.
Aunque la venta todavía no está del todo cerrada, la Embajada de Ghana ya informa en su página web de que desde el 2 de diciembre ocupa su nueva ubicación en el 35 de la calle Olimpo. Por ello, el personal de IU comparte de forma temporal las instalaciones con los nuevos dueños, hasta que finalice el proceso o encuentren una nueva sede.
IU PLANEABA VENDER LA SEDE DESDE HACE MÁS DE UN AÑO
Por su parte, fuentes municipales han explicado a Europa Press que la formación lleva más de un año planteando que se venda esa sede a terceros y que el Consistorio ha puesto como condición para subrogar el derecho de superficie que sea para otra entidad pública.
Ahora, el área de Desarrollo Urbano del Consistorio madrileño está analizando el proyecto propuesta para que el inmueble albergue la embajada de Ghana, aunque desde este departamento subrayan que «de momento no hay nada autorizado».
En este sentido, las fuentes consultadas apuntan a que habrá una reunión los próximos días a tres bandas para tratar el asunto. Sin consentimiento del Consistorio, la formación no puede vender. La transacción implicaría un nuevo contrato por el derecho de superficie y una actualización del canon.
