La Policía Nacional y la Guardia Civil han firmado un convenio para mejorar la información suministrada desde la red de 22.102 farmacias repartidas por toda España con el objetivo de mejorar la protección y auxilio a aquellos colectivos sociales más vulnerables, como las personas mayores, las víctimas de violencia de género o los menores de edad en situaciones de riesgo, como los malos tratos o el alcoholismo.
Según ha explicado el Ministerio del Interior, los profesionales de farmacias suelen ser los primeros en detectar síntomas de riesgo en el caso de personas mayores, víctimas de violencia de género, menores víctimas de malos tratos o con problemas de alcoholismo, así como la desaparición de personas que, sin motivo aparente, dejan de acudir al establecimiento.
En el acuerdo se contempla la colaboración de los Colegios Oficiales de Farmacéuticos y el propio Consejo General, según ha anunciado el Ministerio del Interior, en virtud del convenio firmado por la Secretaría de Estado de Seguridad y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF).
De esta forma, Policía Nacional y Guardia Civil podrán disponer de la colaboración de la red de farmacias comunitarias para difundir mensajes y material divulgativo con consejos de autoprotección y prevención orientados a estos grupos vulnerables, «aprovechando la accesibilidad, cercanía y confianza de los ciudadanos en las farmacias comunitarias».
Tanto Policía Nacional como Guardia Civil designarán un interlocutor que permita canalizar el intercambio de información para este tipo de usuarios habituales de las farmacias.
Además, se asesorará a las farmacias para una mejor detección de esas señales de alarma y se generarán cauces ágiles para que la información llegue cuanto antes a las unidades policiales adecuadas, «de manera que sea posible habilitar cuanto antes medios de prevención o de auxilio».
La propuesta de colaboración entre Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y los profesionales farmacéuticos partió del Consejo General de Farmacéuticos, que en mayo de 2019 propuso a la Secretaría de Estado de Seguridad la colaboración de la red de farmacias en acciones de interés común dirigidos a las personas mayores y las víctimas de violencia machista.
Desde la Secretaría de Estado de Seguridad se ha valorado la ayuda de las farmacias para generar «avisos de situaciones de riesgo» atendiendo al «arraigo social en el entorno al que dan servicio».