miércoles, 11 diciembre 2024

Médicos internistas apuntan cansancio, fatiga muscular y dolor torácico como secuelas

Cansancio, fatiga muscular, dolor torácico o síntomas psicológicos se incluyen entre algunas de las secuelas del coronavirus COVID-19 destacadas por la Sociedade Galega de Medicina Interna (Sogami).

A través de un comunicado, el médico internista de Sogami Ramón Rabuñal ha explicado que «inicialmente, dada la progresión de la enfermedad, con afectación pulmonar grave que precisaba en muchas ocasiones actitudes agresivas, con soporte en UCI, ventilación mecánica, diálisis, etc». «Pensábamos que las secuelas físicas iban a ser muy importantes», ha abundado.

Sin embargo, el doctor Rabuñal ha señalado que, a medida que se fue conociendo más la enfermedad y «teniendo ya resultados de evolución de series más grandes de pacientes», han visto que, «en los pacientes que sobreviven, afortunadamente las secuelas físicas no son tan graves».

Por parte de Sogami han indicado que las secuelas físicas han sido «en general de poca entidad y asociadas fundamentalmente al tiempo de estancia en UCI: polineuropatía del paciente crítico, con pérdida de masa muscular y debilidad en este contexto, secuelas de la intubación prolongada, etc». «Por el contrario la función pulmonar se recuperó prácticamente al completo en la mayoría de los pacientes. «Hemos observado síntomas más inespecíficos, como astenia, cansancio, fatiga muscular o algias torácicas, similares a los descritos en algunas series», ha indicado.

En esta línea ha señalado que «también son frecuentes los síntomas psicológicos derivados tanto de la propia enfermedad, como de la situación excepcional en la que vivieron los pacientes, aislados de su entorno y con poco contacto humano». «En este sentido sí que observamos cuadros de ansiedad, depresión, y trastornos del sueño», ha abundado.

TIEMPO

Entre los pacientes jóvenes y mayores, Sogami ha explicado que «se observa que los primeros suelen presentar estos problemas con menor intensidad, y con recuperación más temprana».

En relación al tiempo que puedan durar estas secuelas, el doctor Rabuñal ha afirmado que «todavía no hay datos para establecer la duración de estos síntomas». «Pero teniendo en cuenta la experiencia previa de otros pacientes con enfermedades virales agudas y/o ingresos prolongados en UCI esperamos que la mayoría de los síntomas se vayan resolviendo en los próximos meses conforme los pacientes recuperen su vida habitual», ha concluido.