Para merendar, a la hora del desayuno… Sus posibilidades son casi infinitas. A todos nos gusta disfrutar de un buen dulce de vez en cuando y, mucho mejor, si este lo podemos realizar en casa. Por eso, una de las mejores recetas para preparar, sobre todo si tenemos niños pequeños, son los donuts caseros. Será un postre que gustará a todos y que querrán repetir.
Aunque estamos acostumbrados a consumirlos de grandes marcas, lo cierto es que, si sabemos hacerlos, en casa nos pueden quedar igual o mucho mejor. Sabrosos, esponjosos, todos nos preguntarán de dónde los hemos comprado. La gran noticia es que serán mucho más saludables, pues no tendrán azúcares añadidos ni ningún otro tipo de aditivo.
Si ya se te está haciendo la boca agua, esto te interesa. Descubre cómo hacer donuts caseros igualitos a los de marca.
Empezamos a hacer la masa
En primer lugar, a la hora de hacer la masa, lo primero que debemos hacer es disolver la levadura en el agua y en la leche. Para ello, solo tenemos que verterla en un vaso y darle vuelta junto con estos dos líquidos hasta que veamos que se disuelve por completo. En un bol aparte, mezclaremos la harina, el azúcar y la pizca de sal.
Después, tendremos que incorporar la leche junto a la mantequilla, siempre a temperatura ambiente, así como a la esencia de vainilla y el huevo. Por fin, una vez tengamos todos los ingredientes bien mezclados, llega el momento de ponernos a amasar, uno de los más divertidos de la receta.
Para hacerlo, se puede emplear un robot de cocina, pero también podemos hacerlo con nuestras propias manos, siguiendo las líneas tradicionales. El resultado siempre debe ser una masa bien elástica, que no se pegue. En caso contrario, puede que necesite una pizca más de harina. En hacer esto emplearemos unos 10 minutos, pues debe ponerse lisa y suave. Mejor ser pacientes.
