Parece que la vacuna del coronavirus llegará en menos tiempo del que pensábamos. Parece que Pfizer distribuirá las primeras dosis en Estados Unidos a finales de este año, y en nuestro país podrían llegar en una fecha similar las de AstraZeneca y Moderna. Pero no podemos confiarnos, con la esperanza de que esto ponga fin a la pandemia, las personas que han superado el coronavirus tendrán que hacer frente en muchos casos a una serie de efectos secundarios o enfermedades como poco incómodas, de las cuales todavía no se han medido las consecuencias.
Efectos psicológicos
Pero sin ninguna duda, los efectos secundarios más evidentes de muchas de las personas que han superado el coronavirus son los efectos psicológicos. Falta de apetito, delgadez o desánimo son los signos más evidentes de aquellas personas que tras la enfermedad desarrollan el «síndrome post-covid». No es extraño que muchas personas manifiesten un cuadro depresivo tras haber sufrido una enfermedad larga y dura. En el caso del coronavirus, una pandemia mundial, que implicó un confinamiento domiciliario y la soledad para muchas personas, las secuelas psicológicas entraban dentro de lo previsto. Las personas que han estado más graves o han sido de hospitalización larga tienen más posibilidades de desarrollar un síndrome de estrés postraumático, depresión o ansiedad. Otra patología que también se ha visto tras la primera ola es la del «síndrome colateral del covid», que la padecen las personas que no se han contagiado pero que han sentido mucho miedo e incertidumbre durante el confinamiento.
