El Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación trasladó este miércoles al embajador de China en España el rechazo del Gobierno a las «desproporcionadas sanciones» impuestas contra varios ciudadanos europeos por parte del gigante asiático en represalia a las medidas adoptadas por la UE en relación con la situación de Derechos Humanos en la provincia de Xinjiang.
Según han explicado fuentes diplomáticas este viernes, el embajador chino fue convocado por la titular de la Dirección General de América del Norte, Europa Oriental y Asia-Pacífico del Ministerio con el fin de abordar los últimos acontecimientos en lo relativo a las sanciones.
El lunes, los ministros de Exteriores de la UE aprobaron sanciones contra cuatro dirigentes chinos responsables de la represión de la minoría uigur en la provincia de Xinjiang, donde las autoridades de Pekín cuentan con programas de vigilancia, detención y adoctrinamiento de este grupo.
China respondió de forma inmediata a las primeras medidas contra dirigentes chinos por parte de la UE desde la masacre de Tiananmen en 1989, con sanciones contra diez políticos y cuatro entidades de la UE. Entre los sancionados figuran cinco eurodiputados, tres diputados nacionales y dos académicos.
En este sentido, desde el Ministerio español se trasladó al embajador chino «el firme rechazo a las desproporcionadas sanciones», toda vez que se considera que la respuesta de Pekín a las sanciones europeas, conformes con el Derecho Internacional, va en contra del «derecho a la libertad de expresión de académicos, parlamentarios y pensadores».
Además, el Gobierno considera que con su acción se daña la imagen de China en España, habida cuenta de que la opinión pública española «sigue muy de cerca la situación en Xinjiang», han subrayado las fuentes, lamentando igualmente que China haya optado por cancelar el diálogo en materia de Derechos Humanos con la UE.
