El Gobierno ya tiene redactada la Estrategia Estatal por la Bicicleta, un documento que tras años de trabajo, recoge cientos de medidas a aplicar hasta 2025, con el propósito de impulsar la bicicleta en todos sus ámbitos. Enseñar en los colegios a usar y manejar la bicicleta o crear una titulación oficial a nivel estatal de mecánicos de bicis son algunas de las medidas que recoge la Estrategia.
La Estrategia, que se presentará este lunes, se divide en 10 áreas temáticas en la que se recogen 28 bloques de acción. La primera área tiene el objetivo de conseguir un mayor incremento en el uso de la bicicleta y un cambio cultural favorable hacia la movilidad sostenible.
Para ello, el Ejecutivo apuesta por el lanzamiento de campañas de impulso de planes de movilidad ciclista a centros de trabajo y de fomento de movilidad sostenible al centro educativo, incluyendo el reconocimiento a las mejores prácticas; el diseño y puesta en marcha de programas de eventos de bicicleta al trabajo y de una guía para la promoción de la bicicleta al trabajo.
También con el fin de implantar un cambio cultural en España con respecto al uso de la bicicleta, se plantean acciones destinadas a la formación en movilidad ciclista como el desarrollo de actividades de educación vial a través de la utilización de espacios en centros escolares o el lanzamiento de un programa de ayudas para la realización de actividades ciclistas en los centros educativos para así «formar al alumnado, a progenitores y al profesorado en movilidad segura y habilidades de manejo de la bicicleta».
También aboga por la creación de una titulación oficial a nivel estatal de técnicos y mecánicos de bicicletas; o la posibilidad de diseñar un programa curricular de especialización en cicloturismo (circulación, mecánica básica, primeros auxilios, meteorología, ecología, etc.) como unidad de competencia en la formación de guía de turismo activo.
APARCAMIENTOS OBLIGATORIOS EN VIVIENDAS
Con respecto a las infraestructuras, el Gobierno plantea la planificación y desarrollo de una red estatal básica, continua y homogénea, de infraestructuras ciclistas interurbanas; el diseño y ejecución de un plan de conservación y eliminación de tramos de concentración de accidentes ciclistas en vías interurbanas; el apoyo a la elaboración de planes específicos de acceso a infraestructura y servicios ciclistas urbanos en áreas periféricas y con riesgo de exclusión social; o el apoyo a la elaboración de planes de adaptación de grandes vías de acceso a ciudades para su uso por bicicletas.
Dentro de este apartado, destaca la iniciativa de crear estacionamientos para bicicletas. Más en detalle, se aboga por modificaciones normativas, como el Código Técnico de Edificación para la inclusión de aparcamientos obligatorios en viviendas de nueva construcción, o la de la regulación de las comunidades de vecinos para la asignación de espacios comunitarios al aparcamiento y depósito de bicicletas.
También se elaborarían guías para facilitar la instalación de aparcamientos en viviendas, comercios, oficinas y edificios públicos, así como en centros docentes; o apoyar la elaboración de planes de implantación de aparcabicis en espacios vecinales y de proximidad.
Asimismo, la Estrategia recoge el fomento de la intermodalidad bicicleta-transporte público con medidas como la elaboración de un procedimiento tipo para la coordinación entre gestores de transporte e infraestructuras y administraciones públicas que permita la construcción o instalación de aparcamientos de bicicletas en las estaciones; la planificación consolidada de proyectos de conectividad de estaciones de tren, de autobús y aeropuertos con redes ciclistas urbanas y periurbanas; o el desarrollo de soluciones de abonos de transporte y billetes únicos, integrados con los sistemas de bicicleta compartida.
LA BICI PARA IR AL TRABAJO
El documento también dedica una de las áreas temáticas a medidas encaminadas a conseguir que la bicicleta se convierta en un medio de transporte cotidiano. En este sentido, destaca que los dos ámbitos principales en los que habría que fomentar este cambio hacia una nueva cultura de la movilidad son el transporte al trabajo y el transporte escolar.
Con respecto al transporte al trabajo, el Gobierno considera que para incidir directamente sobre las empresas en este aspecto, las administraciones públicas pueden «ofrecer beneficios específicos» para aquellas que incluyan en su política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) planes de transporte al trabajo que otorguen protagonismo a alternativas de transporte sostenible.
«Por su parte, las empresas que deseen fomentar entre sus empleados la movilidad sostenible, saludable y segura, pueden ofrecer horarios de trabajo conciliadores y flexibles, compatibles con la movilidad en bicicleta, así como habilitar espacios donde poder estacionar y realizar un mantenimiento básico de las bicicletas», añade la Estrategia.
Así, sugiere que para promover su uso, las empresas pueden ofrecer incentivos económicos a los trabajadores que adopten la movilidad sostenible y segura, y pueden ofrecer cursos específicos sobre movilidad y habilidades en bicicleta dentro de sus planes de formación. En concreto, la Estrategia propone que, dentro del concepto de retribución en especie, que normalmente recoge ayudas para los trabajadores para el transporte público o incluso para gastos de combustible por usar el vehículo privado, «se podría ampliar para recoger el uso de bicicletas para ir al trabajo, o su mantenimiento si se asocia a estos motivos».
El documento también considera importante fomentar el cicloturismo en España, así como el ciclismo como deporte, y el desarrollo del sector empresarial en torno a la bicicleta como estratégico para la economía.
FINANCIACIÓN
El Gobierno pretende financiar las medidas recogidas en la Estrategia a través de financiación pública y privada.
Según señala el Ejecutivo, la financiación pública puede proceder de las partidas presupuestarias de los diferentes ministerios, gobiernos autonómicos o administraciones locales implicadas, y no descarta que se destinen fondos europeos procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Otra posible fuente de recursos la conforman los fondos de préstamos y ayudas, nacionales y europeas, disponibles para proyectos y actuaciones relacionadas, de manera directa o indirecta, con la bicicleta, y también podrán generarse recursos a través de la provisión de servicios (mediante tasas o precios), de la recaudación de aportaciones (como cuotas de socios de clubes de marca o productos) o de patrocinios y colaboraciones externas (donaciones privadas o de promotores).