¿Sabías que los detectives pueden aportar pruebas con validez judicial a la hora de denunciar fraudes laborales?
No es oro todo lo que reluce, ni en todas las empresas se cumplen las leyes a rajatabla. Es una realidad más que clara que, aunque poco a poco se está enmendando, sigue arraigada como un mal endémico que atrae no solo a empresarios, también a trabajadores.
Un informe elaborado por la Asociación Contra el Fraude registraba que, en el periodo 2020-2021, los fraudes empresariales han aumentado considerablemente a raíz de la pandemia. Algo debido, principalmente, a la incertidumbre por una posible crisis económica causada por el COVID y, también, al acentuado clima de inseguridad laboral en todo el país.
El problema para los implicados es que todo esto se ha traducido en casos como ERTE mal empleados, trabajadores realizando sus labores menos tiempo del que deberían, trabajadores echando más horas de las que deberían, fraudes mercantiles o incluso bajas laborales falsas. Afortunadamente, cada vez hay más herramientas para combatir este tipo de situaciones, herramientas como Nova Detectives.
¿Por qué un equipo de detectives? Porque, aunque muchos lo desconozcan, estos profesionales pueden aportar pruebas que serían totalmente válidas en caso de proceder por la vía judicial. A la hora de interponer una demanda, sea de una empresa a un trabajador, o viceversa, profesionales de verdad, como los citados más arriba, pueden ayudar a que el juicio se resuelva de la forma más justa posible gracias a las pruebas que aportan.
¿Cómo ayudan los detectives a las empresas o a los trabajadores?
Los detectives pueden hacer un férreo seguimiento de aquello que se le indique. ¿Eres un empresario que sospecha de un trabajador que lleva una larga temporada encadenando bajas? El problema de las bajas laborales falsas es algo del pasado gracias a estos expertos. Pueden seguir e investigar hasta dar con la verdad y recabar material que lo demuestre.
¿Eres un trabajador que está sujeto a un contrato que no se cumple? Los detectives pueden examinarlo, registrar informes con horarios, con condiciones, con todo aquello que pueda servir para actuar de forma legal y reclamar lo que se debe.
Desafortunadamente, como decíamos antes, el clima laboral en el país está pasando por una situación especialmente tensa ya no solo por los coletazos de la pandemia, sino también por el encarecimiento de las materias causado por los conflictos bélicos al este de Europa. También cabe mencionar, que por el motivo que sea, en España la “picaresca” siempre ha sido un característica identificativa, aunque eso se traduzca en trabajadores que buscan la forma de trabajar menos de lo que deben, o en empleados que prefieren saltarse a la torera lo que dictan convenios y leyes sobre los derechos de sus empleados.
En mitad de esa vorágine de conflicto entre ambos bandos, los detectives privados son clave. Pueden llegar a efectuar labores de espionaje industrial, para demandarlo en caso de ser cierto, estudiar a individuos que se han declarado insolventes para eludir una deuda, localizar a personas o investigar bajas laborales. Pueden ofrecer una ayuda vital para hacer justicia. Y eso, ahora, es más necesario que nunca.
