Gabriel Rufián y Miriam Nogueras, cabezas de lista de ERC y Junts por Barcelona, respectivamente, avivan la guerra para captar a los irredentos independentistas, un sector prácticamente desmovilizado a tenor de los resultados de la CUP en las pasadas elecciones municipales en la provincia de Barcelona.
La izquierda radical de la CUP se quedó fuera del Consistorio de Barcelona, muy por debajo del 5% exigido, pero continúan siendo fuertes en los distritos más importantes de la Ciudad Condal, como Gràcia, donde supera con creces el umbral mínimo, y quinta fuerza política. La CUP se decantó por Basha Changue para los comicios del 28 de mayo, y casi roza el 5% en Ciutat Vella y Sants-Montjuïc, pero se quedaron atrás en las zonas más humildes, como Horta, Sant Martí y Sant Andreu. En el Eixample tampoco levantaron cabeza.
Los más radicales la han tomado con Esquerra, llegando a expulsar a Oriol Junqueras de las manifestaciones.
La estrategia de la CUP ha sido hábilmente contrarrestada por Vox y Barcelona en Comú Podem. Los ‘cupaires’ pusieron el foco en el turismo, los desahucios y se posicionaron a favor de la ocupación ilegal de los edificios El Kubo y La Ruïna, pese a la masiva protesta vecinal contra los ‘okupas’ por la inseguridad generada en el barrio. Vox, por su parte, convocó a los vecinos para denunciar estas prácticas permitidas por las autoridades. La inseguridad de Barcelona hizo mella en el votante a la hora de escoger la papeleta.
LA CUP Y ERC PIERDEN FUELLE EN BARCELONA
La formación radical situó como cabeza de lista a una diputada en el Parlament e intentar entrar de nuevo en el Ayuntamiento de Barcelona, pero la ciudad no les quiere dentro de la institución. Su inercia se apagó en 2015 y podría ser el preludio de su salida del Congreso de los Diputados el próximo 23 de julio si ERC y Junts, así como los de Colau, consiguen captar a sus votantes de la misma forma que han hecho hace mes y medio.
Junts, con Nogueras al frente, tiene más fácil ahora construir su discurso tras la supresión de la inmunidad de Carles Puigdemont. El Tribunal General de la UE abre la puerta a la emisión de euroórdenes por parte del Tribunal Supremo, con la figura de Pablo Llarena como remitente. La decisión del tribunal europeo ha dado alas al núcleo más duro de Junts, encabezado por Laura Borràs y con el brazo ejecutor de Nogueras.
Tal es la oportunidad vista que el icono del periodismo separatista del Grupo Godó, Jordi Basté, acudirá a Bruselas. Se trata del programa radiofónico más escuchado en Cataluña y liderado por un ‘procesista’ que silencia cada vez más el pluralismo en sus tertulias. Basté se erige como el altavoz del mesías Puigdemont, como el azote de quien pone en cuarentena su visión independentista de Cataluña. Puigdemont es el líder y los demás son merecedores de su feroz crítica. Roger Montañola lo vivió en sus propias carnes en su entrevista en RAC-1.
JUNTS SE MOVILIZA CON EL ARIETE DE PUIGDEMONT PESE AL RIESGO DE PERDER A LOS MODERADOS
ERC, con Rufián, tratan de ganarse a los independentistas huérfanos. La formación republicana está en la diana por haber desactivado el movimiento construido desde hace una década y que llenó las calles de Cataluña incluso después del referéndum ilegal del 1-O. Los más radicales la han tomado con Esquerra, llegando a expulsar a Oriol Junqueras de las manifestaciones.
Ahora, para tratar de rebajar la tensión y tras la salida de Junts de la Generalitat, los de ERC han premiado a Jordi Cruixart, uno de los presos indultados por el Gobierno de Pedro Sánchez, con la Cruz de San Jordi. No obstante, los republicanos han guardado bien las distancias con Junts, al apartar a Jordi Sánchez, ex presidente de la Asamblea Nacional Catalana y ex diputado. Los dos ‘Jordis’ eran uña y carne a la hora de arengar al separatismo desde Plaza Cataluña o Plaza de España. Ambos fueron la punta de lanza de la movilización masiva del separatismo, pero ERC sólo ha premiado a uno de ellos.
Esta clara diferencia con Junts y la cercanía de ERC con el PSOE ha alejado al votante independentista que aboga por la unidad sellada en las anteriores elecciones autonómicas, pero se rompió en 2021.
ERC CARGA CONTRA UNA NIÑA DE 17 AÑOS PARA GANAR VOTOS
En este momento, ERC busca dar el golpe de efecto atacando a la princesa de Girona, un niña de 17 años. Los mismos que han montado una comisión en el Parlament para defender al menor no tienen pudor a la hora de mostrar su desprecio a la hija del Rey Felipe VI. Para ello, han dado visibilidad a la candidata y hermana de una de las consejeras presas por el ‘procés’, Montserrat Bassa. El fin es tratar de avivar la llama para captar al núcleo más radical en un territorio donde la CUP se ha hecho con la alcaldía de Girona, con Lluc Salellas al frente, quien conversó este martes con Puigdemont.
ERC trata de pescar en este río revuelto con arengas cada vez más gruesas: «Echar a la monarquía neofascista de nuestro país»; o calificar a la monarquía de «corrupta». La propia Bassa tildó al Rey como «nuestro enemigo», un jefe del Estado que «nos reprime». La represión, según ERC, es haber indultado a sus jefes, permitirles no cumplir ni la mitad de la condena impuesta y poder seguir cobrando del erario público. Una estrategia que recuerda a los 18 meses de Rufián.
Cabe señalar que el independentismo no ha permitido la celebración de los Premios de la Fundación de la Princesa de Girona en un espacio público y declaró a la monarquía como ‘persona non grata’, sin que nadie haya hecho nada al respecto.
Ante esta situación, Nogueras vuelve a coger el ariete de la Cataluña oprimida para tratar de ganar votos, el mismo argumento que ERC. La CUP, por su parte, trata de dinamitar al Estado desde dentro mientras sus diputados cobran del propio país que dicen no pertenecer.
