El Comité Ejecutivo del SMA ha exigido este martes «de manera urgente» que los facultativos de la comunidad andaluza dispongan de test de detección del coronavirus y las mascarillas FFP2 disponibles, ya que, según han informado «en este momento existe en Andalucía un stock de mascarillas suficiente para dotar al personal sanitario que está asistiendo a pacientes con sintomatología respiratoria».
En este sentido, desde el sindicato han advertido de que «las mascarillas no pueden estar almacenadas en espera del famoso pico o en los bolsillos de los responsables de su distribución que las administren discrecionalmente», al tiempo que han insistido en que «cada trabajador debe recibir su equipo de protección en cuanto lo solicite».
En la misma línea, también han informado de que «existen compañeros que están siendo reincorporados tras una baja por infección sin realizarles previamente el test de detección del coronavirus», que es el único modo de garantizar que no lo transmitirán a sus compañeros y pacientes. A su juicio, esta práctica les parece «gravemente irresponsable», por lo que exigen que «todo facultativo que haya dado positivo o se encuentre en estudio para descartar el contagio, no se reincorpore a su labor asistencial a menos que dé negativo en la PCR».
El Sindicato Médico ha recordado que el procedimiento de actuación frente a casos de infección por el SRAS-coV-2 publicado por el Ministerio de Sanidad el 25 de febrero recomendaba que, ante los casos en investigación, probables o confirmados, los profesionales se protegiesen con bata impermeable, guantes, gafas y mascarilla FFP2; si bien posteriormente también recomendaban usar «mascarilla quirúrgica o FFP2 siempre asegurando la existencia de stocks suficientes».
Así, desde el Comité Ejecutivo del SMA han criticado que «el Ministerio de Sanidad redujo el nivel de protección recomendado ante la falta de equipos de protección suficientes y se recomendó el uso de mascarillas quirúrgicas simplemente porque no había otras». Por esta razón, tal y como han continuado, «los profesionales han corrido los riesgos derivados de la imprevisión del Gobierno, lo que es una grave irresponsabilidad que deberá ser depurada por los Tribunales de Justicia en su momento.
Por último, los facultativos andaluces han indicado que «España es el país afectado por la pandemia con el porcentaje más alto de profesionales entre los positivos y en Andalucía ese porcentaje alcanza un escalofriante 22,3 por ciento», por lo que «es indudable que la causa principal de estas cifras vergonzosas es que no se nos ha proporcionado protección suficiente y esta negligencia intolerable no puede prolongarse ni un día más».
