El memorial de Putin y otras joyas de la arquitectura comunista

Ex miembro de la KGB durante el comunismo de la última etapa, comunista convencido y autócrata redomado, en plena efervescencia occidental en contra de las esculturas que loan el pasado (sea bueno o malo, porque como dicen en el Ministerio del Tiempo, el tiempo y la historia es lo que es), Putin se desmarca de nuevo con un acto patriótico muy al estilo comunista: una nueva estatua mastodóntica que recuerda a otras joyas de la arquitectura comunista. Más grácil, quizás, pero con la misma intencionalidad de hacer melomanía de lo icónico a través de la arquitectura. Déjate sorprender por algunas de las construcciones más impactantes que nos ha aportado el brutalismo soviético.

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MONUMENTO HOMENAJE A LOS CAÍDOS EN LA IIGM, DE PUTIN

Ha sido el último gran gobernador del comunismo más clásico. Perpetuarse en el poder parece ser su máxima, al puro estilo de los grandes secretarios generales del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética, cuando esta existía oficialmente. Putin ya tiene su gran obra de arquitectura comunista en la forma de homenaje, como también es habitual en estas megaconstrucciones soviéticas. En esta ocasión, a los millones de soldados que murieron en la II Guerra Mundial. El lugar elegido Rzhev tampoco es casual, ya que aquí tuvo lugar una de las batallas más duras en vidas humanas. Aquí se ha erigido esta imponente estatua de bronce de 25 metros de altura y más de 85 kg de peso que sustenta, como la del gran Gengis Khan, una base con césped. Eso sí, aquí lo esbelto y elegante prima sobre lo brutal. ¿Quieres saber en qué joyas de la arquitectura comunista se ha inspirado? Sigue leyendo.

Vladimir Putin encabezó el acto inaugural del imponente monumento.

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