La Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social ha creado un punto pionero en la Región de Murcia de acogida temporal y de transito para el alojamiento, manutención, cobertura de necesidades básicas y atención social y educativa de mujeres en contextos de prostitución y trata, así como de sus hijos, que son también víctimas de la violencia de género.
Así lo ha destacado la vicepresidenta del Gobierno regional y consejera de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social, Isabel Franco, en su intervención hoy en la Comisión especial de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Informe del Senado sobre las estrategias de violencia de género aprobadas en el marco del Pacto de Estado.
Según la consejera, ese dispositivo, puesto en marcha durante el estado de alarma, «se ha convertido en un recurso clave para ir de la mano de las mujeres víctimas de violencia de género, y está siendo referente para el trabajo de investigación de las Fuerzas de Seguridad del Estado», según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.
Franco, que ha abordado la situación de la violencia machista en la Región antes y después del estado de alarma, ha indicado que «todas las comunidades autónomas estamos llamadas a acompañar a quienes atraviesan una situación de violencia de género, impulsando políticas públicas que mejoren su calidad de vida y promuevan la igualdad».
En este sentido, la vicepresidenta ha subrayado que la Comunidad de Murcia «está comprometida con la lucha y erradicación de la violencia machista y, por ello, desde que comenzó el confinamiento sostuvimos y reforzamos el trabajo que ya hacíamos para contener y asistir de la mejor manera posible a quienes sufren la violencia».
Los casos de mujeres que han recibido atención en los centros especializados para mujeres víctimas de violencia de género (CAVI y PAE) han aumentado en 1.894 entre marzo y junio de este año respecto al anterior. Por ello, «ha sido fundamental estar más cerca que nunca, a pesar de la distancia física, brindándoles apoyo y acompañándolas de forma individual por teléfono, videollamada o presencialmente», añadió Franco.
LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA DURANTE EL CONFINAMIENTO
Durante el confinamiento, la Consejería destaca que se han mantenido los servicios y recursos, creado nuevos programas y campañas de sensibilización, mejorado los protocolos de actuación e innovado con otros nuevos más concretos y adaptados a las circunstancias, como proporcionar alojamiento a las personas sin domicilio.
Así, se han puesto en marcha iniciativas en previsión de posibles situaciones de desamparo, como el dispositivo de acogida temporal y de tránsito y la contratación de recursos técnicos y logísticos para el servicio de acompañamiento a mujeres en contextos de prostitución. Además, se desarrollaron diversas campañas de sensibilización, como ‘Si la oyes, llama’ o la realizada junto con el Colegio Oficial de Farmacéuticos, ‘Marcarilla 19’, dirigidas a buscar la colaboración ciudadana en la denuncia de casos de violencia machista que se pudieran estar produciendo durante el confinamiento y disuadir a los agresores.
PACTO DE ESTADO CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO EN MURCIA
El esfuerzo de la Comunidad por cumplir con los derechos de las mujeres víctimas de violencia de género se refleja en el cumplimiento del Pacto de Estado, según las mismas fuentes. Por ejemplo, con el refuerzo en prevención y sensibilización en el ámbito educativo y local, mejorando la respuesta institucional ante esta lacra, coordinando y trabajando en red con distintas instituciones y con programas como ‘Ilusiona-t’, que ofrece formación ‘online’ para mejorar la inserción laboral de las mujeres o ‘Empoder-Arte’, para que aprendan un oficio artesanal.
Perfeccionar la asistencia, ayuda y protección a las víctimas es otra de las grandes prioridades del Pacto de Estado. La Región dispone de siete casas de acogida, seis Puntos de Atención Especializada (PAE), 16 plazas de acogida para mujeres víctimas con problemas de adicción, y 22 centros especializados de atención especializada para mujeres víctimas de violencia (CAVI) que han atendido este año a 16.729 mujeres, un promedio de 1.500 al mes.
No sólo las mujeres sufren la violencia de su maltratador ya que, en muchos casos, sus hijos son los verdaderos perjudicados. De ahí que se haya intensificado su asistencia y protección junto con la Asociación para el Desarrollo de Salud Mental de la Infancia y la Juventud Quiero Crecer, que les proporciona atención psicológica.
Además, el Servicio de Atención Psicológica para menores expuestos a la violencia de género (SAPMEX) ha atendido este año a 569 menores; el Punto de Encuentro Familiar Viogen, con cinco sedes, ha atendido a 45 familias, y el Centro de Emergencia ha ayudado a que 82 mujeres y 49 menores dispusieran de un lugar de acogida inmediato.
«Todas estas actuaciones -indicó Franco- ponen de manifiesto que la Región cumple con el Pacto de Estado contra la violencia de género, porque es un derecho de las mujeres que debe hacerse visible a toda la sociedad». «En un escenario de dificultades económicas entre mujeres dependientes económicamente de sus agresores que les imposibilitará en muchas ocasiones romper ese vínculo, seguiremos trabajando en nuevos proyectos de empleabilidad, como el ‘Proyecto Carmen’, que les permita suficiente autonomía para acudir a denunciar», añadió.
Asimismo, se pondrán en marcha dos recursos de acogida, uno específico para mujeres gestantes y otro para mujeres con problemas de salud mental, así como ‘Punto Violeta’ para abordar la violencia sexual con un programa integral de sensibilización y formación.
