El huevo frito es, sin duda, uno de los grandes manjares que nunca ha faltado en nuestra gastronomía. Además, es un plato barato y facilísimo de hacer, aunque mucha gente encuentra problemas a la hora de romper la cáscara o le da miedo lo mucho que salta el aceite caliente en el que lo hacemos. Pero es el último paso que puede arruinar todo. Hablamos del momento en el que lo sacamos de la sartén. El secreto para hacerlo nos la da la OCU y más abajo te la contamos.
1Los beneficios de comer huevo frito
Los huevos son uno de los alimentos más completos que se pueden ingerir. Contienen proteínas, grasas saludables y una gran cantidad de vitaminas y minerales, entre ellas el 9% de la cantidad diaria recomendada de Vitamina B12, el 15% de la CDR de Vitamina B2, el 6% de la Vitamina A, el 22% de la CDA de selenio y muchos otros nutrientes como calcio, hierro, potasio, zinc, manganeso o Vitamina E. Los huevos también son de fácil digestión y sencillos de preparar, la que más nos gusta es hacerlos fritos.