El consumo de alcohol está tan arraigado socialmente que no nos damos cuenta de los límites a los que llegar. ¿Beber a diario se considera alcoholismo? ¿O es cuestión de cantidad? ¿Eres alcohólico si bebes poco pero en casa y sin embargo no se considera si lo haces mucho socialmente? No es relativo, sino que son tendencias o impresiones que tiene la gente, porque ellos mismos forman parte de esos casos. Veamos por tanto cómo diferenciar alcoholismo de un abuso de alcohol, una reflexión y análisis necesario al ser una costumbre tan legal como indisoluble de nuestro día a día y nuestra vida social. Y es que la mayoría no entiende salir con los amigos o divertirse sin él.
¿CÓMO SABER SI SE ESTÁ A PUNTO DE CRUZAR LA LÍNEA?
Como hemos señalado, a veces la frontera es difusa o muy fina, y puede llevar a confusión, considerándose alguien alcohólico son serlo, y viceversa. Así que toma buena nota de estas señales que te darán un diagnóstico. Veamos qué nos indicaría que podríamos estar cruzando la línea:
Si sientes una imperiosa necesidad de beber.
Si una vez que ha comenzado a beber alcohol, es incapaz de dejarlo.
En los momentos en los que no bebe, se suceden diversos síntomas propios de la abstinencia, como náuseas, sudores, ansiedad, temblores, irritabilidad y problemas para dormir.
Se desarrolla una mayor tolerancia al alcohol. Quiere decir que la persona tendrá que beber mayor cantidad de alcohol cada vez para obtener los mismos efectos.
