El Senado destinará 5,3 millones de euros a gestionar los viajes de senadores y personal en 2023 y 2024

El Senado ha adjudicado por 5.390.000 euros el contrato de gestión y asistencia técnica de viajes y visitas de sus integrantes para este año y el siguiente, un acuerdo que podrá ampliarse anualmente tres veces, hasta el 31 de diciembre de 2027. Cada año, incluidas las prórrogas, tendrá un coste de 2.695.000 euros.

La Mesa de la Cámara Alta ha elegido a Viajes El Corte Inglés para este servicio entre las tres empresas que presentaron ofertas, según ha publicado este martes el Boletín Oficial del Estado (BOE).

La agencia seleccionada, que ya consiguió el anterior contrato, adjudicado en diciembre de 2018, logró en julio de 2022 el mismo servicio para el Congreso de los Diputados y por 23,3 millones.

En la memoria justificativa, el Senado especifica que el presupuesto es «exclusivamente orientativo», ya que depende del gasto final que haga la Cámara en cuanto a sus necesidades de gestión y asistencia técnica en viajes.

Del mismo modo, el Senado señala que no se podrá revisar la oferta económica durante la vigencia inicial del contrato ni, si las hay, en las eventuales prórrogas. De prorrogarse hasta el año 2027, el importe podría alcanzar los 16.170.000 euros, IVA incluido.

En 2022, el gasto de los desplazamientos de los senadores con cargo al presupuesto de la Cámara Alta ascendió a 2.069.327,02 euros durante los nueves primeros meses del año, lo que supone 574.000 euros, casi un 40% más que en 2021 a esas alturas, cuando todavía había restricciones por la pandemia e incluso limitación de aforo.

El contrato en cuestión consiste en gestionar la reserva, emisión, modificación, anulación en su caso, y entrega de billetes, alojamiento y alquiler de vehículos, que sean necesarios con motivo de los desplazamientos y estancias que, por razones del servicio, hagan los senadores y el personal de la Cámara.

Además, comprende cualquier tipo de servicio propio de una agencia de viajes, como hacer las gestiones necesarias para la consecución de visados cuando sean necesarios a la hora de viajar.

De manera adicional, el Senado podrá organizar con la compañía adjudicataria los desplazamientos nacionales de los senadores, si bien estos traslados dentro del país podrán también contratarse por la institución de manera ajena a la empresa adjudicataria, detalla.

El Senado también podrá encargar a la adjudicataria la gestión de la organización de visitas, reuniones, congresos, conferencias y otros eventos de similares características, siempre previo presupuesto presentado por la agencia de viajes, según los pliegos.

Para este tipo de eventos, el Senado podrá encargar a la compañía la reserva y la contratación de servicios de catering y de búsqueda de espacios para acoger eventos, así como servicios de azafatas, organización de recorridos turísticos, servicios técnicos y otros que puedan ser necesarios para cumplir con lo previsto.

Entre los requisitos de la Cámara para adjudicar este contrato está que la empresa se comprometa a ofertar las tarifas más ventajosas en cada viaje y por cualquier medio de transporte, en función de las fechas, horarios o características del pasajero.

Por regla general, los viajes se realizarán, «a ser posible», en vuelos, líneas o recorridos que tengan la condición de regulares, trayectos directos (sin escalas), y con billete electrónico.

También la empresa tiene que comprometerse a aplicar los descuentos o mejoras que puedan aplicarse por los acuerdos o convenios que el Senado haya suscrito o suscriba con empresas, compañías o entidades dedicadas al transporte y/o a la hostelería.

Las cláusulas establecen que la agencia deberá tratar de forma directa con los hoteles sin que intervenga un mediador, dado que en «ningún caso» podrán cargarse al presupuesto del Senado gastos por la intermediación de terceros en la reserva o pago de hoteles.

Igualmente, la agencia tendrá que pagar los servicios contratados, incluidos los hoteles, por adelantado, para así facilitar que las delegaciones puedan presentar el bono a la llegada como justificante de pago y sin necesidad de realizar un desembolso.