El Consejo de Administración de Mediaset España celebrará este miércoles junta general extraordinaria de accionistas para votar la fusión transfronteriza por absorción de la compañía por parte de su matriz MFE-Media For Europe.
Según comunicó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los accionistas también votarán la segregación de Mediaset España a favor de su filial íntegramente participada Grupo Audiovisual Mediaset España Comunicación y el balance intermedio auditado cerrado a 31 de octubre de 2022 como balance de segregación.
Por otra parte, la junta de accionistas también deberá ratificar el nombramiento por cooptación y reelección de Alessandro Salem como consejero ejecutivo de la compañía audiovisual. Salem es consejero delegado de Mediaset España desde principios de año.
Los consejos de administración de Media For Europe (MFE) y Mediaset España acordaron llevar a cabo un proceso de fusión por absorción de Mediaset España por parte de MFE, que se espera culmine en el segundo trimestre de 2023 después de la aprobación por las juntas de accionistas de MFE y de Mediaset España.
Esta operación ya estaba prevista en el folleto de la oferta de adquisición de MFE sobre las acciones de Mediaset España realizada en julio de 2022. En aquella operación, Media For Europe logró alcanzar el 82,92% del capital y los derechos de voto de Mediaset España, después de haber cerrado la OPA lanzada por el 44,31% que no controlaba.
Adicionalmente, MFE ha comprado a Vivendi y Sinclair el 1,53% de Mediaset España por un total de 15,5 millones de euros.
En este escenario, Media For Europe no contempla «ningún traslado de empleados y directivos» tras la consumación de la fusión con Mediaset España. A 31 de diciembre de 2022, el Grupo MFE controlado por la familia Berlusconi (49,68%) y Vivendi (24,03%), contaba con un total de 4.861 empleados, de los cuales 1.537 corresponden al número de trabajadores en España.
Según comunicó en febrero el grupo de comunicación a la CNMV, las operaciones y actividades de producción permanecerán en los respectivos países, es decir, Italia y España.
En el documento en el que explicaba sus objetivos estratégicos y operativos tras la fusión, Media For Europe sí reconoce que «se revisará el modelo organizativo y operativo» del grupo, «tal y como se ha venido haciendo en los últimos años, con el fin de capturar nuevas oportunidades de crecimiento, permitir una toma de decisiones ágil y una mayor responsabilidad».
Según señalaba en el documento, una estrategia operativa integrada y la toma de decisiones centralizada a nivel de MFE, junto con una presencia paneuropea, «beneficiarán al Grupo MFE y abrirán nuevas opciones de negocio para aprovechar las ventajas de ser el primer agente en dar este paso en el entorno de los medios de comunicación«.
Tras la operación, MFE prevé convertirse en un grupo mediático «más grande y diversificado con acceso a una audiencia combinada de más de 100 millones de espectadores para competir mejor con los operadores mundiales».
Además, considera que «la plena alineación de intereses» entre los accionistas de MFE y Mediaset España «permitirá un enfoque coordinado y, en consecuencia, más eficiente de las inversiones en contenido local y tecnología, reduciendo la duplicación de inversiones y permitiendo un uso más eficiente de los recursos financieros.
«El Grupo MFE dispondrá de mayores recursos financieros para aumentar las inversiones en los mejores contenidos locales y la mejor experiencia de visionado en todas las plataformas (lineales y no lineales) tanto en Italia como en España», sostenía la compañía, que estima de forma preliminar unas sinergias de unos 55 millones de euros anuales a nivel de resultado neto de explotación (Ebit) con la fusión.