En el Partido Popular están molestos. No todos, el clan gallego de seis populares que sigue fiel a las consignas del presidente de la formación conservadora. Sin embargo, no parece que Alberto Núñez Feijoo consiga unir a los populares bajo su mando. Las críticas de Génova crecen y tienen que ver con cómo está llevando su líder el cetro de líder de la oposición. Recientemente ha circulado por los grupos de Whatsapp del Partido Popular una crítica a Feijoo por marcharse del Senado a la 20.00 horas cuando todavía quedaba sesión por delante. Pero no solo eso. También empiezan a crecer los mensajes en los que le acusan al líder del partido de huir de los enfrentamientos políticos para evitar desgastar su figura.
El líder popular está perdiendo el control de su propia ejecutiva porque la línea seguida no convence a los suyos. Alberto Núñez Feijoo mantiene un ritmo de campaña lento, desaparecido y sobretodo enquistado en el Senado. El problema es que no parece que su paso por este órgano representativo sirva de mucho. En Génova están visiblemente molestos por el hecho de que Feijoo abandonara el Senado a las ocho de la tarde cuanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, permaneció ahí hasta el final. Desde el PP consideran que Alberto Núñez Feijoo tiene que mantener el pulso al líder socialistas con más cara a cara y que se marche del Senado cuando no es que tenga demasiadas posibilidades de escenificar su enfrentamiento no ha sentado precisamente bien.
Alberto Núñez Feijoo solo ha tenido un acierto, a ojos de las fuentes de Génova: contratar a Borja Sémper y ponerle al frente de la portavocía del Partido Popular. De momento, es Sémper el único que mantiene el pulso y la presencia mediático del PP. Que Feijoo no «dé el callo» en el Senado es algo que ahonda más en el discurso de que el presidente del Partido Popular está enterrado y no quiere desgastar su figura en el exterior. Algunos culpan a su equipo. Otros entienden que es el propio estilo del líder popular. Pero todos tienen claro que no es la estrategia a seguir con un PSOE que se mantiene beligerante en las encuestas y que podría gobernar con Sumar si se cumplen algunos pronósticos de las encuestas electorales.
Desde el propio PSOE también se están encargando de publicitar estas «ausencias» de Feijoo en el Senado, aunque desde este partido dejan claro que es por el temor que tiene el presidente del PP a enfrentarse de tú a tú con el líder socialista. En cualquier caso, todos reconocen, tanto desde el PP como desde los demás partidos, que Alberto Núñez Feijoo no es precisamente un apasionado por batirse cara a cara con sus rivales políticos. Ahora mismo cree que hacen más guardando silencio y marchándose a una hora prudente del Senado que en cualquier otro momento. Es una situación complicada que se sostiene, según fuentes del PP, porque el Partido Popular se mantiene a flote en las encuestas y en los sondeos. Y eso sin entrar en que el mapa se teñirá de azul después del 28-M.
Tampoco es que haya una pelea intensa por vender medidas políticas. Feijoo no elude por completo los enfrentamientos, pero sí que mantiene un bajo perfil y una exposición «controlada» a los debates políticos en este periodo electoral en el que se juegan prácticamente todo. El presidente del PP entiende, según cuentan fuentes de Génova, que todos estos problemas internos son pasajeros siempre y cuando se llegue a la Moncloa en diciembre de este año. De no ser así, el propio gallego sabe que hay dos barones que están pendientes de ver cuándo llega su momento.