Éste es el vídeo que exculpa a los narcos de Barbate del asesinato de los guardias civiles

Un vídeo grabado por uno de los detenidos el día 10 de febrero de 2024 acusado del asesinato de dos guardias civiles en aguas de Barbate puede convertirse en la principal prueba para exculpar a los seis detenidos que se encuentran en prisión desde entonces. Ser exonerados de asesinato no les pondrá en libertad inmediatamente, pues todos reconocieron el delito de contrabando y la fiscal antidroga de Cádiz, Ana Villagómez, ya se ha mostrado contraria a su excarcelación porque siguen imputados en «delitos graves de contrabando y pertenencia a organización criminal, castigados con penas que pueden alcanzar los siete años de prisión».

Para entender por qué antes se les acusó y ahora se les exculpa es clave conocer el «Informe de reconstrucción de los movimientos registrados por la narcolancha que embiste a la patrullera de la Guardia Civil el 09/02/2024» realizado el pasado 24 de abril. Las 52 páginas recogen minuto a minuto la sucesión de hechos hasta que Miguel Ángel Gómez y David Pérez fueron asesinados por los narcos que embistieron la zodiac donde prestaban servicio.

Para llegar a esa conclusión los instructores de la Guardia Civil estudiaron los vídeos de la cámara Go Pro que llevaba en su casco uno de los integrantes del GEAS de la zodiac, grabaciones obtenidas de fuentes abiertas que subieron a redes sociales sus autores, el vídeo de la cámara instalada en la azotea del puerto deportivo de Barbate y de testigos a bordo de una draga en el Puerto Deportivo de Barbate, una máquina que se usa para sacar objetos del fondo del mar.

La lancha de la Guardia Civil en el puerto deportivo de Barbate
La lancha de la Guardia Civil en el puerto deportivo de Barbate

Entre los vídeos recopilados por la Guardia Civil resultó finalmente fundamental uno volcado desde el teléfono móvil de José Antonio G.C., uno de los tres «mecánicos» que habían subido a la narcolancha de Kiko el Cabra para hacer reparaciones aquella noche. José Antonio fue detenido por agentes de la Guardia Civil el día 10 de madrugada tras desembarcar en el puerto de Sotogrande junto a otras dos personas, Jairo José P.G. y David G.N. En el momento de su detención portaban abrigos de camuflaje, dos de ellos y el otro un abrigo rojo, además de trajes de agua con fuerte olor a gasolina. El mismo día a las dos y media de la tarde eran detenidos los otros tres tripulantes tras embarrancar la narcolancha en la Playa La Hacienda, de la Línea de la Concepción.

Desde el primer momento todos los detenidos negaron haber sido los asesinos de los dos guardias civiles en Barbate y sí admitieron el delito de contrabando, pero como los seis tienen antecedentes policiales y algunos de ellos penales se decretó su ingreso en prisión mientras avanzaba la investigación.

Captura del vídeo que exculpa a los narcos de Barbate del asesinato de los guardias civiles
Video grabado por los detenidos de Barbate.

Todas las defensas recurrieron esta medida y la de José Antonio G.C argumentó entre otras cuestiones que «todos los investigados manifestaron (…) no sólo que ellos no eran los responsables del hecho delictivo del asesinato que se les imputa en estos momentos, sino que incluso manifestaron que uno de ellos, en concreto nuestro patrocinado, había realizado una grabación de lo que ocurrió desde su propio teléfono móvil, donde se podía ver cómo la embarcación que embistió a la embarcación de la Guardia Civil era otra y no la que ellos en ese momento se encontraban embarcados».

En otra parte del recurso el abogado explica que «si realizó la grabación de los hechos desde su teléfono móvil, y en ella se puede ver como en la distancia, es otra embarcación la que realiza el hecho deleznable, es imposible que el autor material de lo ocurrido fuera alguna de las personas que hoy están detenidas».

https://youtube.com/shorts/lQs2CQmwZl8

Tal y como contamos ya en MONCLOA, varios de los narcos grabaron la lancha de la Guardia Civil, algo que refleja el abogado en su recurso al añadir que «en un receso realizado para almorzar, cual fue la sorpresa de los letrados, que tienen conocimiento de la existencia de otros vídeos grabados, también por otros dos investigados y que uno de ellos se lo envió a su pareja sentimental y otro se lo envió a un familiar. Una vez que por parte de las defensas se visualizan los vídeos, se puede comprobar que los mismos demuestran la inocencia de los investigados, en cuanto a los dos delitos de asesinato, los cuatro delitos de asesinato en grado de tentativa y seis delitos de atentado grave».

Al menos tres vídeos de tripulantes fueron grabados aquella tarde noche en la bocana del puerto donde seis narcolanchas buscaban el abrigo de la borrasca Karlotta que se cebaba con un fuerte viento y lluvia en el sur de España. Las barcas se amarraron a dos boyas y hasta ahora se mantenía la teoría de que solo una de ellas tenía cuatro motores. En uno de estos vídeos filmado por los tripulantes de otra barca se les ve pasar lentamente a amarrarse en el centro del puerto. Sin embargo, este jueves se conoció el último informe de la Guardia Civil presentado al Juzgado donde se dejaba claro que la narcolancha de Kiko el Cabra, no es la misma que arrolló la barca neumática de los guardias civiles y acabó con la vida de dos de ellos el pasado 9 de febrero.

El informe da un giro a la investigación, ya que si la lancha incautada no es el arma usada para el asesinato de los guardias sus ocupantes son inocentes de asesinato, aunque no del delito de contrabando. La cuestión ahora es que los verdaderos culpables no han sido detenidos. Uno de los ocupantes de la narcolancha siempre señaló a un marroquí, un tal Karim, que dirigía la verdadera narcolancha asesina.

El abogado de uno de los detenidos ya explicaba en su recurso que «el vídeo se realiza sobre la embarcación en la que iban los investigados, puesto que al comienzo del mismo se puede ver la parte trasera de la embarcación, se pueden ver los 4 motores de la embarcación, así como los dos mástiles que portaba la misma, uno con los sistemas WIFI y otro mástil con los sistemas GPS, por lo tanto se corresponde con la embarcación encontrada en la playa de La Hacienda». Lo que se resume en que «es materialmente imposible que fuera la embarcación que provocó el fatal desenlace».

Es más, en otro vídeo, sostiene el mismo letrado que «se puede observar la existencia de 2 embarcaciones con 4 motores, una de ellas con dos antenas que se corresponde con la que ocupaban los investigados y otra embarcación, con 4 motores y una sola antena».

Al mismo tiempo que se practicaban estas diligencias se realizaba el volcado de los terminales móviles incautados a los detenidos, uno de ellos el iPhone de José Antonio G.C., cuyo análisis «habría permitido alcanzar una información de enorme trascendencia para la investigación».

De hecho, fue el propio detenido quien en su declaración ante el juez «vino a afirmar haber grabado lo acontecido (…) mientras se encontraba a bordo de una narcolancha distinta a la autora, ubicada al pairo (en el mar sin desplazarse) en la bocana del citado puerto (Barbate), siendo coincidente este emplazamiento con la perspectiva desde la cual parece realizarse la grabación, un lugar compatible a su vez con la EAV de cuatro motores advertida en la reconstrucción de los movimientos registrados por la narcolancha que embiste a la embarcación de la Guardia Civil», según recoge el último informe de la Guardia Civil.

DECLARACIONES EN BARBATE

Con este vuelco de la investigación este viernes 10 de mayo declaran en el juzgado mixto número 1 de Barbate los cuatro guardias civiles que sobrevivieron a la embestida de la embarcación de narcos. Comenzarán a las 10 de la mañana la de los agentes de la Benemérita como perjudicados y después declarará como testigo un vigilante de seguridad privada del Puerto de Sotogrande (Cádiz).

Hay que recordar que la noche del 9 de febrero Miguel Ángel González del GEAS y David Pérez del GAR se echaron al mar en una lancha neumática para intentar identificar varias narcolanchas amarradas en mitad del puerto deportivo de Barbate. Ambos perdieron la vida aquella noche.

El cabo David fue quien grabó la principal prueba de cargo, un vídeo de 12 minutos grabados por su cámara GoPro, que resultaría herido de gravedad. Sus dos de sus compañeros de la Guardia Civil tuvieron peor suerte y murieron tras ser arrollados premeditadamente por una narcolancha. Las imágenes no dan lugar a la duda, no se trató un accidente y dejó claro que los narcos iban a hacer el mayor de los daños posibles contra la lancha de los guardias civiles.

EL JUZGADO DECIDIRÁ SOBRE LOS DETENIDOS

Con independencia de estas declaraciones el juzgado tendrá que pronunciarse sobre la libertad de los detenidos o si permanecen todavía en prisión, porque el delito de contrabando no parece suficiente para que permanezcan en la cárcel.

Los investigadores dejan claro que de estas seis lanchas solo dos tenían cuatro motores y de éstas sólo hubo una con una única antena. En el grupo de lanchas donde estaba amarrada esta última embarcación «se advierte la presencia de un único tripulante con chaqueta de color naranja, a bordo de una de las otras dos embarcaciones junto a la de interés, donde se mantiene al menos hasta las 19.05 horas del día 9 de febrero de 2024 que se hace de noche, imposibilitándose a partir de entonces seguir su rastro a través de las imágenes disponibles».

Según el mismo informe, en el teléfono de José Antonio G.C. se encontró una grabación «de vídeo, de 3 minutos 33 segundos, efectuada desde el propio terminal objeto de análisis (…) y fecha de modificación viernes 9 de febrero de 2024, 20:23:46. Este video recoge la secuencia de movimientos previos efectuados por una narcolancha diferente a la que se encuentra José Antonio G.C., antes, durante y después de llevar a cabo la fatal agresión, la cual quedó filmada en el vídeo grabado por el usuario del terminal analizado». Es decir, que obviamente si uno de los detenidos grabó con su móvil el asesinato a distancia, no podía estar a bordo de la narcolancha que mató a los guardias.

Así lo entendieron los investigadores que reflejaron que «este vídeo por tanto, despejaría las dudas sobre la teoría antes expuesta, alcanzada tras el informe de reconstrucción de movimientos efectuados por la narcolancha que embistió a la patrullera permitiendo concluir que, efectivamente, solo una EAV de cuatro motores y una antena, ocupada al menos por tres tripulantes (…) habría llevado a cabo un total de seis ofensivas contra los agentes siendo la última mortal para dos de los seis tripulantes de la embarcación oficial de la Guardia Civil». Ahora se abre una nueva investigación que tratará de encontrar a los autores de estos dos asesinatos. La Guardia Civil no dejará de buscarlos.